Aunque nos pueda sonar atípico, en esta ocasión no fue un alumno enfadado el que intentó agredir a su examinador, fue el propio profesor de la autoescuela en un arrebato quien agredió al examinador.
¿ Qué es lo que ocurrió?
Según el escrito del Ministerio Público, esto ocurrió el día 24 de septiembre de 2013 cuando el examinador de la DGT subió al vehículo del acusado para llevar a cabo un examen práctico. Durante la prueba parece ser que tuvo lugar una discusión entre el profesor y el examinador.
Este último pidió que se conectara el testigo acústico y luminoso que alerta del uso de los mandos por parte del profesor, a lo que este se negó alegando que se le había desprendido y lo llevaba guardado, que si el examinador no estaba conforme que no realizara el examen.
Esto provocó que pararan el vehículo y el examinador intentara bajarse del mismo tras advertir de que daría parte de lo ocurrido a Tráfico, pero para su sorpresa el profesor estuvo más rápido y colocándose delante de la puerta trasera donde iba el denunciante le cogió del cuello a la vez que lo insultaba y amenazaba, llegando incluso a las amenazas de muerte como “te tengo que quitar la vida, por mis hijos que te tengo que matar”.
Tuvo que interceder el propio alumno para poder separar al agresor de su asustada víctima, que sufrió lesiones de consideración en el cuello, asi como un trastorno ansioso depresivo que lo ha obligado a estar bajo un tratamiento psicológico especializado.
Una vez libre la víctima comenzó a correr alejándose del lugar, pero el profesor consiguió librarse de su alumno y salió tras él amenazándolo de muerte de nuevo. Fue necesaria la intervención de otro profesor y el propio alumno para poder sujetarlo.
¿Porqué es noticia ahora?
Estos hechos son noticia a día de hoy puesto que el pasado martes 31 de marzo de 2015 se celebró el juicio que había sido suspendido en su fecha original — 20 de noviembre de 2014 — por no poder comparecer el principal testigo de lo sucedido que era el alumno, pues se encontraba en un crucero trabajando por esa fecha.
¿Qué le puede pasar al profesor?
La Fiscalía considera lo ocurrido como un delito de atentado y una falta de lesiones por lo que solicitan un año y seis meses de prisión, así como una multa de 720 euros, además del pago de 9.000 euros a la víctima como indemnización.
Por otra parte también se presenta como acusación la Abogacía del Estado que solicita tres años y medio de cárcel por el delito de atentado y otro más por el de lesiones. Por si no fuera suficiente con todo esto, la Asociación de Examinadores de Tráfico (Asextra) pide por un delito de atentado y dos faltas, de amenazas y lesiones, dos años de prisión, un total de 960 euros en multas y 12.000 euros de indemnización, además de que asuma las costas del proceso.
¿Vosotros qué opináis de lo sucedido? ¿Si fuerais el alumno habríais actuado igual? Dejadnos vuestras opiniones sobre el tema en los comentarios.