Nosotros aquí en España siempre quejándonos de la picaresca de la Guardia Civil a la hora de esconder los radares para multarnos. Pero después de ver lo que hace la policía en Arizona, aquí en España estamos a años luz de los yankies.
Resulta que han decidido aprovechar la vegetación autóctona para velar por la seguridad de los conductores. Es decir, han metido cámaras de seguridad dentro de algunos cactus que hay en las carreteras, con el afán de poder identificar matrículas de coches que circulan por esas vías, y así poder cazar a infractores.
No se trata de radares de velocidad, los cuales necesitan de más artilugios de medición. Estas cámaras solo podrán leer matrículas, y así intentar bajar el número de robos de coches de las calles de Paradise Valley, Arizona. Las cámaras de momento solo han sido instaladas, pero aún no están en funcionamiento.
No es la primera vez que ocultan cosas dentro de cactus por esa zona, pues también hay ciertas antenas de telefonía que tienen forma de cactus, suponemos que para camuflar su presencia en el ambiente.
En España por suerte o por desgracia no es tan sencillo encontrar un cactus por las carreteras, por lo que si a la policía se le ocurre una práctica similar, tendrían que esconderlo entre arbustos. Pero dada nuestra educación, seguro que durarían días en la carretera antes de ser robados o destrozados por alguien. Por esa razón los radares fijos en España se meten en cabinas de seguridad o se sitúan en carteles aéreos de la carretera, precisamente para evitar posibles robos.