Ya han transcurrido varias semanas desde el lamentable accidente que costó la vida a Joshua Brown, propietario de un Tesla Model S, que falleció tras un choque mientras circulaba con el Autopilot conectado, pero las críticas al fabricante estadounidense continúan sucediéndose. En esta ocasión ha sido Consumer Reports, una de las revistas norteamericanas de defensa de los consumidores más importantes, la que ha puesto el asunto de nuevo de actualidad al pedir cambiar el nombre del Autopilot de Tesla.
Precisamente hace sólo unos días desde Freno Motor criticamos la actitud de muchos conductores con vídeos en los que se puede observar cómo desvían totalmente la atención de la carretera con el sistema Autopilot conectado, tecnología que en el caso de Tesla ni mucho menos sustituye por completo a la conducción humana.
¿Autopiloto es lo mismo que conducción autónoma?
Pero, ¿acaso una función denominada “autopiloto” no lleva a pensar en una conducción totalmente autónoma? Todo parece indicar que así lo interpretan muchos propietarios de Tesla, lo que ha derivado en esta petición de cambio de denominación. “Estamos muy preocupados porque a los consumidores se les vende un montón de promesas sobre tecnología que no ha sido probada”, señala el comunicado de Consumer Reports.
Sin embargo, desde la firma de automóviles tienen claro que el problema no es propio, sino de interpretación errónea por parte del conductor, y han asegurado que en sus planes no está renombrar su tecnología Autopilot puesto que no existe ninguna ilegalidad en conceder esta denominación.
Otra de las críticas de Consumer Reports está enfocada al hecho de que el sistema de Tesla permita al conductor retirar las manos del volante durante varios minutos mientras está conectado, lo que impide reaccionar de manera inmediata ante un imprevisto, como probablemente sucedió en el trágico accidente.
Y es que al fin y al cabo el sistema de ayuda a la conducción de Tesla no difiere mucho de otros como los desarrollados por Audi o BMW. Estamos ante tecnologías que permiten en momentos puntuales delegar el manejo al propio automóvil, pero que requieren mantener la atención en la conducción puesto que todavía no están perfeccionados. De hecho el accidente mortal de Joshua Brown se produjo porque su Autopilot no fue capaz de detectar la presencia de un camión.
Lo que si esperamos en los próximos meses es quizá una publicidad más conservadora por parte de Tesla a la hora de alardear de las virtudes de su sistema y un impulso importante a su propia tecnología de conducción autopilotada.
