Al paso que vamos parece ser que circular en Cataluña acabará convirtiéndose en toda una actividad de lujo sólo al alcance de los bolsillos más pudientes. Porque en una Comunidad donde sus conductores están más que hartos de tanto peaje, resulta que hemos conocido que el Servicio Catalán de Tráfico quiere tener su propio helicóptero Pegasus.
Está claro que el gobierno catalán se ha fijado en los buenos resultados que están obteniendo los 5 helicópteros Pegasus que actualmente la DGT tiene en funcionamiento por nuestras carreteras a la hora de detectar las infracciones con más precisión y, con ello, las pertinentes multas.
Capaz de detectar y fotografiar las matrículas de los coches a una distancia de 450 metros, este Pegasus también pretende dar un pasito más allá para ser aún más efectivo. Porque además de poder grabar a color en formato de alta definición, el sistema informático de este helicóptero contará con un GPS con la cartografía actualizada de las carreteras y calles de toda Cataluña, y una tablet con conexión a Internet para que su tripulación pueda realizar cualquier tipo de consulta.
Pero aquí no acaba todo, porque quienes circulen por las carreteras catalanas no estarán a salvo de este nuevo Pegasus ni siquiera cuando circulen de noche, ya que también contará con capacidad tanto de visión nocturna como para situaciones de baja visibilidad, cosa que de momento los Pegasus de la DGT no pueden hacer.
El gobierno catalán quiere que este Pegasus esté surcando los cielos a partir del 1 de abril luciendo los colores del Servicio Catalán de Tráfico (naranja y blanco) a través de una empresa adjudicataria que será la encargada de fletar, mantener y manejar este helicóptero. Y todo ello con una inversión de 1.258.614 euros, una elevada inversión que a estas alturas muchos no dudarán en que a la larga será rentable.
Está claro que la polémica sobre las verdaderas intenciones de este nuevo Pegasus está servida, y que ante noticias como ésta ninguno de nosotros podemos evitar el verla como una acción con fines exclusivamente recaudatorios a través de multas y más multas. Esperemos que no sea así.
