La Unión Europea continua su particular cruzada contra las emisiones de CO2 que afectan gravemente a los niveles de contaminación de las ciudades poniendo muchas veces en peligro la salud de la población. Y es que en una votación reciente se han fijado los objetivos de emisiones para 2020, reduciendo significativamente los niveles de emisiones que ya tenían que cumplir los fabricantes a partir de 2015.
Recordemos que a partir de 2015 todos los fabricantes que produzcan más de 1.000 coches al año en la Unión Europea están obligados a cumplir con un máximo de 130 g/Km de emisiones de CO2. La media de emisiones de todos los coches vendidos por cada fabricante deberá estar por debajo de ese límite. En caso de que algún fabricante exceda el límite, pagará multas por cada coche vendido, cuya cuantía dependerá de lo que se exceda el límite y de la cantidad de coches vendidos.
Hoy mismo se han aprobado los límites para 2020, que bajan el límite de emisiones medio para los fabricantes hasta 95 g/Km, 35 g/Km más bajo que el de 2015. Con esta bajada se esperan emitir 50 millones de toneladas de CO2 menos por año en Europa.
Además se han aprobado medidas adicionales como incorporar cuanto antes el procedimiento mundial de ensayo de vehículos ligeros desarrollado por la ONU, que debería entrar en vigor en 2017, o la introducción del concepto de supercrédito, que favorecerá a los coches más limpios.
La introducción del procedimiento mundial de ensayo de vehículos ligeros es según la Eurocámara prioritario, dado que los últimos años los fabricantes han aprovechado las debilidades del actual sistema de homologación para dar datos de consumo y emisiones muy alejados de los que se obtienen en una conducción real.
Como siempre nos gustaría conocer vuestra opinión. ¿Qué os parecen estas medidas? ¿Creéis que los fabricantes podrán cumplirlas o recibirán penalizaciones económicas?