Un día después de su lanzamiento, podríamos decir que el Alfa Romeo Giulia es el claro candidato a ser el coche del año. Es uno de los modelos más esperados de los últimos meses, y de momento no decepciona nada. Los datos que sabemos de la berlina italiana son más bien escasos, pero viendo como será exteriormente, e imaginando su interior, aún por desvelar oficialmente, podemos empezar a soñar con las distintas carrocerías en las que Alfa Romeo ofertará su nuevo buque insignia.
Las rancheras de Alfa Romeo nunca han gozado de mucha popularidad, y su presencia ha sido más bien testimonial. Probablemente es porque pocos son los fabricantes capaces de hacer rancheras bonitas. Aunque ahora que están tan de moda los shooting brake o sportwagon, no nos importaría ver una ranchera coupé como esta imagen que nos trae X-tomi Design de un supuesto Alfa Romeo Giulia Sportwagon.
Pero si la ranchera nos sabe a poco, también estaría bien ver una versión coupé derivada de la berlina, con la misma distancia entre ejes, pero con una caída del techo más pronunciada y baja. Una versión así seguramente no contaría con motores más modestos, y podría venderse solo con el potente Ferrari V6 que vimos en ayer en la versión Quadrifoglio Verde de la berlina. Así sería el Alfa Romeo Giulia Sprint.
Por último, un coche como este no podría dejar de verse en las carreras, así que si pudiéramos ver un Giulia en la DTM, este podría ser su kit de carrocería. Si está destinado a competir de tú a tú con coches como el Audi RS4, BMW M3 o Merecedes C63 AMG, un circuito de carreras no le viene para nada grande.
Aún no conocemos la estrategia de ventas que seguirá Alfa Romeo, pero todo me hace presagiar que las versiones que veremos por la calle, aún con el paquete deportivo Quadrifoglio Verde (si es que permite elegirlo sin el motor Ferrari), serán con motores diesel bastante modestos, y donde sus clientes busquen consumo y economía por encima de las sensaciones.
A mi me parecería bien que no existiera la posibilidad de elegir el paquete deportivo si no es asociado a los motores más potentes. Lo que es un sacrilegio es ver por la calle un Golf R Line que aparentemente es igual que un Golf GTI, pero que bajo su capó aloja un pobre 1.6 TDI de 105 caballos. Casos similares ocurren con los Mercedes con paquete AMG. Así que estaría bien que Alfa Romeo se desmarcara e intentara buscar la exclusividad con su coche. Pueden hacerlo muy bien, pero aún no sabemos cómo les saldrá la jugada.