Aunque no lo parezca, si hablamos de coches híbridos, hace mucho tiempo que existe vida más allá del Toyota Prius. Las estrictas normas anticontaminación y la cada vez más valorada eficiencia de consumos sin pérdida de prestaciones están marcando la pauta, y las alternativas híbridas son una buena respuesta para este tipo de demanda. Por eso, las marcas apuestan cada vez más fuerte por esta forma de movilidad, y ya no resulta raro ver en casi todos los fabricantes que algunos de sus modelos cuenten con versiones híbridas en sus catálogos.
Para Audi, dicha ofensiva híbrida comenzó hace ya tres años, ofreciendo al consumidor versiones con tal configuración para sus modelos Q5, A8, y A6 sedán. Todos ellos montan una mecánica 2.0 TFSI que desarrolla 211 cv de potencia. Unido a ésta, encontramos un motor eléctrico de 54 cv que combinados ofrecen una potencia total de 245 CV. En el caso del Audi A6 Hybrid, el vehículo podía circular durante dos kilómetros de forma totalmente eléctrica, así como poder alcanzar los 100 km/h sin tener que usar el motor de combustión. Además, las prestaciones eran excelentes, alcanzando una velocidad máxima de 238 km/h y acelerando de 0 a 100 km/h en sólo 7,3 segundos, con su consumo mixto de 6,2 litros.
Sin embargo, ahora que el Audi A6 ha sido sometido a un reciente restyling para no perder la coba de sus competidores, la firma de Ingolstadt ha decidido jubilar a la versión híbrida. ¿El motivo? Pues como suele ser habitual en estos casos, su escaso volumen de ventas.
Y es que desde salió al mercado, el Audi A6 Hybrid ha registrado un volumen de 4.000 unidades fabricadas, representando el mercado asiático el 80% del total de dichas ventas (en Estados Unidos no se comercializa) Ello indica que su balance en Europa es, si no triste, miserable.
Y es que no debemos olvidar que la cultura del diésel sigue muy arraigada en nuestro mercado, y que el precio de la versión híbrida rondaba los 60.000 euros, lo que lo convertía en un modelo más caro que sus hermanos diésel que ofrecían prestaciones similares y menores consumos. Como ejemplo, vale decir que la versión diésel que igualaba en potencia al Hybrid, el 3.0 TDI 245, tiene un precio 3.000 inferior al híbrido, con un consumo también inferior de 0,2 litros y mejores prestaciones, ya que acelera de 0 a 100 km/h en 6,1 segundos y alcanza una velocidad máxima de 250 km/h.