En los últimos años la competencia entre los fabricantes ha alcanzado cotas nunca antes vistas en la industria del automóvil. Tanto es así que empresas de la talla de Volkswagen se han visto involucradas en un auténtico escándalo relacionado con las emisiones de partículas contaminantes. Precisamente la compañía protagonista en el día de hoy, Audi, acaba de asumir que el dichoso software tramposo afecta a 2,1 millones de vehículos. Así pues, ya son tres las marcas que están inmersas en este problema que tiene una dimensión mundial. La empresa de los cuatro aros, como no podría ser de otra manera, ha terminado estando en el ajo por su fuerte relación con la matriz de VAG.
Al margen de todo lo que ha ocurrido en esta última semana convulsa, Audi ha mantenido sus diferentes proyectos en los que ha participado en estos últimos años. Uno de los que más entusiasmo ha generado desde su conocimiento ha sido su plan de llegar a la luna en el corto y medio plazo. En su día, Freno Motor ya desveló en qué consistía esta ambiciosa idea, la cual se corresponde con un concurso propuesto por el gigante Google. Esta vez, la compañía premium ha sacado a la luz un vídeo muy especial en el que se muestra el por qué de su participación.
El por qué de Audi en el proyecto Google Lunar XPRIZE
El reto es increíble. De hecho, sería una de las mejores formas para ‘perdonar’ la acción irresponsable del software y devolver al grupo VAG el prestigio que hasta la fecha ha mantenido. Cierto es que Audi siempre se ha caracterizado por ofrecer uno de los mejores sistemas de tracción a las cuatro ruedas. Con la denominación quattro, cualquier persona saber destacar lo eficiente que es y saber que está ante un todoterreno diferente, que aporta ese plus que la competencia tiene muy difícil de contrarrestar.
De hecho, en el anterior vídeo los escenifican gracias a los diferentes pavimentos que es capaz de superar. Ya sea nieve, grava o barro, siempre ha salido indemne de las batallas y esfuerzos a los que se ha visto sometido. Por ello, ¿por qué no dar un paso más allá y que suponga un golpe en la mesa en el segmento? ¿Por qué no aprovechar el enigma que rodea al concurso?
El principal obstáculo del suelo lunar es la composición de la arena. Es mucho más fina que la que se suele encontrar en la Tierra por lo que es imprescindible que cualquier vehículo que quiera rodar por la superficie lunar posea un sistema de tracción óptimo. Gracias a un equipo de ingenieros específico y a su know how en la materia, Audi parece estar consiguiendo unos resultados que le permitirían hacer una escapada por el satélite.
No queda mucho para saber cual será el proyecto que ganará un premio por valor de 30 millones de euros para investigar y conseguir circular unos cuantos metros por una superficie que aún esconde muchos enigmas y secretos. Mientras tanto, Audi mantendrá su posición en referencia a una de sus inversiones más curiosas de los últimos años.