Dentro de la gama M de BMW, el M3 E30 podría ser el modelo estandarte y el más valorado por los seguidores de la filial alemana. Es cierto que alguna otra edición especial del mítico modelo podría alcanzar una revalorización mayor como es el caso del M3 CSL. Precisamente este último debería ser el modelo con el que se debería realizar una comparación con lo último salido de la división M pero históricamente, el E30 es el que querría todo purista y seguidor de la compañía.
Hace algo más de un año, se puso en entredicho la idea de crear una versión un tanto especial del nuevo BMW M4, sucesor de la saga M3 pese al cambio de las siglas. Hace poco que venimos disfrutando de las imágenes y características técnicas que posee una versión GTS que será fabricada únicamente en un tirada de 700 unidades. Así pues, ¿puede apreciarse alguna similitud entre lo que fue el modelo que rompió con todos los estándares y lo que viene para continuar ensalzando la leyenda?
BMW M3 E30 vs BMW M4 GTS
Obviamente, no es una comparación estricta ya que para ello, debería enfrentarse al poco exitoso concept creado hace cosa de poco más de un año. Salvando una distancia que se aprecia en el diseño y en las prestaciones, ¿podrían transmitir las mismas emociones o la última creación podría pecar de contar con numerosas ayudas a la conducción?
Quien prefiera optar por un tacto más duro, un pilotaje más puro y una mayor conexión con el coche, obviamente preferirá todo un coche old school y por ello, se decantará por la versión aparecida a mediados de los años ochenta. En cambio, quien se haya acostumbrado a la exquisitez, a la eficiencia y a la mayor potencia que ofrece un M4, preferirá una conducción más contemporánea, más del día a día. Ello no quiere decir que ninguno de los dos sea mejor que el otro solo que no se transmiten las mismas sensaciones en uno y el otro.
Así, la versión que podría rivalizar y provenir directamente desde lo más brillante creado por la división Motorsport no podría ser otra que este GTS para ser un descendiente orgulloso de los míticos E46 CSL y E30 Evolution. Con 500 CV de potencia extraídos el motor de 6 cilindros en línea, es capaz de conseguir el 0-100 km/h en tan solo 3,8 segundos. Como es lógico, no consigue alcanzar la marca de algunos superdeportivos pero tampoco es ningún problema por no ser del mismo segmento. Sin embargo, sí que consigue superar la barrera de los 300 km/h, fijando el máximo en 305 km/h, limitados de forma electrónica. Por supuesto, es el modelo más rápido de la serie M3/M4 de lejos.
En relación al peso, pese a contar con una maravillosa relación peso/potencia de 3 kg/CV, no hubiese conseguido mismos registros que los anteriores si no se dispusiese del motor con mayor potencia instalado de serie en un M4. Si no contase con un motor con tanto poder, el anterior cociente se dispararía por encima de los 5,5 Kg/CV que registran muchas unidades del precursor de la saga. ¿Qué quiere decir esto? La instalación de la última tecnología implica un mayor peso, tal y como se ve reflejado en los 1.510 kilogramos que pesa aún habiendo empleado materiales ligeros como la fibra de carbono.
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¿Con cual te quedarías? Es una opinión muy personal que debería defender cada persona. Lo único que sí que es seguro es que se eligiese uno u otro, debería contar con un buen colchón de dinero detrás para hacer frente al pago de cualesquiera que sea la elección. La tendencia de revalorización del BMW M3 E30 continúa ascendiendo y parece que todo continuará en un futuro pero, ¿merece la pena gastarse unos cuantos miles de euros en un vehículo histórico antes que comprarse su tataranieto a estrenar? Aquí no hay debate, cada coche tiene sus pros y sus contras.