Con el verano ya a cuestas, los desplazamientos se ponen a la orden del día y seguramente tu, tengas que hacer algún desplazamiento algo más largo durante esta época del año. Con la subida de precio que las petrolíferas suelen hacer en verano, llenar el deposito en verano nos cuesta un poco más, tanto que llenar 60 litros de combustible nos costará casi 90 euros.
Es por ello que la compañía especializada en movilidad, Arval, ofrece en sus redes cinco pequeños consejos que nos permitirán rascar algo más la cartera en nuestros desplazamientos veraniegos. Algunos de ellos seguramente ya sabréis, pero los datos que arrojan nos pueden convencer de que a veces, un simple gesto nos puede hacer que recorramos algunos kilómetros extra con ese mismo combustible antes de volver a repostar.
Evita la sobrecarga en el vehículo
Esto es más que evidente, a mayor carga en el vehículo el consumo de combustible será mayor ya que el motor, sobre todo en pendientes ascendentes, tendrá que hacer un mayor esfuerzo. Por cada 100 kg de más que añadimos a nuestro coche el consumo se incrementará alrededor de un 5%. El ahorro de peso repercute en una mayor eficiencia de nuestro coche, simplemente retirando una baca vacía, evitaremos un aumento de un 2% en el consumo.
No bajes ventanilla y usa el aire acondicionado
Seguramente el truco del profesor japonés te habrá hecho ahorrar ya unos céntimos evitando tener que poner el aire acondicionado al máximo cuando entremos al coche. Y es que un excesivo uso del aire acondicionado puede aumentar nuestro consumos nada menos que un 20%, bastante, ¿verdad? La situación en la que tenemos que tener nuestro aire acondicionado es en una temperatura que oscile entre los 22 y 23 grados. Llevar las ventanillas subidas a altas velocidades, sobre todo a más de 100 km/h hace que el coche tenga menos eficiencia aerodinámica y repercuta en el depósito, gastando una media de un 5% más.
Cuando pares mucho tiempo, apaga el motor
Es un gesto muy simple que nos puede hacer ahorrar al depósito algún pequeño porcentaje de combustible. De esta forma, cuando nuestra parada dure mas de un minuto, deberemos apagar el motor. Con este simple gesto podremos ahorrar una media de 150 euros al año en carburante.
Vigila la presión de tus neumáticos
Los neumáticos son el único contacto de nuestro vehículo con la carretera, por lo tanto, son realmente importantes mantenerlo en una presión correcta. Unos neumáticos desinflados o con presión inadecuada o incluso un filtro de aire sucio, puede aumentar nuestro consumo en un 6% mientras que unas bujías sucias pueden hacer que aumente en un 10%.
Evita el punto muerto
Mantener el motor en punto muerto también repercute en un gasto de combustible, aunque muchos crean que mantenerlo hace al vehículo no consumir nada. En ralentí nuestro vehículo consumirá más o menos medio litro de combustible por hora. Vale que no sea mucho, pero al precio que esta el litro de combustible puede hacernos ahorrar algo. También ayuda el mantener una conducción suave y progresiva, evitando acelerones innecesarios. En una bajada el movimiento de las ruedas mantiene el motor en marcha y, a mas de 20 km/h el consumo de gasolina será nulo.
