Como todos sabemos, el neumático es el elemento de nuestro vehículo que mas relevancia tiene a la hora de asegurarnos seguridad y comodidad durante los trayectos, es la herramienta que nos mantiene agarrados a la carretera, la que evita que derrapemos y nos salgamos de ella con la gravedad que ello puede producir en nosotros o en nuestros seres queridos.
Pero ahora, y gracias a Neumáticos Km0, es posible comprar neumáticos a plazos, con lo que tenemos la opción de comprar buenas marcas y recién salidos de fábrica evitando poner en riesgo a los que hagan uso de nuestro vehículo particular. Si quieres saber Cómo financiar neumáticos, solo tienes que hacer clic en el enlace referenciado en este párrafo. Si, además, quieres conocer 3 factores decisivos para comprar un neumático a plazos, solo tienes que seguir leyendo.
3 factores fundamentales para comprar un neumático a plazos
En ocasiones la falta de liquidez económica nos lleva a cometer el error de comprar neumáticos de segunda mano que no nos proporcionan la seguridad y tranquilidad necesarias para nuestros desplazamientos. Con la posibilidad de comprarlos a plazos, este problema desaparece, siendo esta el principal factor y el más recurrente por los clientes para comprar neumáticos de calidad para no tener que jugársela en la carretera.
Con el sistema de financiación para pagar neumáticos a plazos tendrás la posibilidad de hacerlo a medida, según tus opciones de pago para que no te veas asfixiado cada mes con una nueva letra. Podrás elegir el modelo que más te convenga en un periodo comprendido entre los 3 y los 12 meses.
Además, antes de elegir el neumático podrás realizar los cálculos online, según la marca y el modelo de neumático que elijas, con lo que tendrás claro y a tu elección qué neumáticos y por qué mensualidad puedes adquirirlos. En esta tienda online de neumáticos, “Neumáticos Km0”, puedes elegir la marca que prefieras al mejor precio del mercado, por lo que lo que vas a tener que pagar cada mes será mucho más asequible que en cualquier otra empresa de la competencia.
Qué neumático elegir para nuestro vehículo
Una vez que sabemos que podemos comprar fácilmente cualquier tipo de neumáticos, debemos tener los conocimientos necesarios para saber cuál es el que tenemos que adquirir.
En este sentido, tenemos que preguntarnos cuál es el uso que se le va a dar al vehículo, qué tipo de carreteras va a frecuentar, cuál es el clima que va a tener que soportar; si va a ser seco, húmedo o nevado…
Aunque por defecto podemos usar los neumáticos que recomienda el fabricante del coche, es decir, los que vienen de serie, esta no es la única opción. Si queremos poner de nuestra parte y aumentar la seguridad en la conducción podemos cambiarlos a nuestra elección, y para hacerlo bien, hay que identificar el código que aparece en los laterales de los neumáticos.
En este lugar se puede apreciar una serie de tres números y dos letras cuyo significado debemos conocer y que es el siguiente; el primer número nos está indicando el ancho de la rueda en milímetros, el segundo la relación existente entre la altura y el ancho del perfil de la rueda, a continuación vendrá una letra, que hace referencia a la estructura que tiene el neumático, el siguiente será otro número que nos informará sobre el diámetro interior de la rueda en pulgadas y, por último, nos encontraremos una letra más que es un código de seguridad, del que podemos comprobar su equivalencia en cualquier tabla de códigos de velocidad.
A grandes rasgos y en relación al tipo de clima dominante podremos elegir entre tres tipos de neumáticos; el de verano, el de invierno y el mixto, puesto que cada cual guardará unas características propias y particulares que lo hacen más factible para cada tipo de clima, y serán básicamente referidas a la anchura, al diámetro y a la estructura de dibujo del neumático.
Otro factor a tener en cuenta para acertar en esta elección es la forma que tiene de conducir el conductor habitual del vehículo, si estamos acostumbrados a conducir de forma deportiva tendremos que llevar neumáticos con más agarre y estabilidad, por ejemplo.
Para saber cuándo debemos cambiar el neumático, cuando no se sabe de forma clara como cuando sufrimos un pinchazo o un excesivo desgaste, tenemos que fijarnos con atención en la profundidad de las cenefas (si las ruedas están en buen estado) que deben estar entre los 8 y los 8,5 milímetros.
Hay que medir la profundidad de los dibujos de la rueda, así como sus laterales, que no sufran un desgaste acusado. En cualquier caso y como último consejo, si los neumáticos han pasado la edad de 5 años hay que revisarlos a conciencia al menos una vez al año, y si superan los diez no tenemos ni que planteárnoslo, hay que cambiarlos con urgencia.