Estamos próximos a vivir un nuevo cambio de hora. Entramos en el horario de invierno y con ello llegan una serie de medidas que hay que tomar para evitar sufrir un riesgo siempre latente. Suele pasarse por alto pero es conveniente seguir unos consejos para no lamentar en un futuro las posibles consecuencias de un accidente.
El cambio de hora, más allá de si uno está en contra o a favor, hace que se modifiquen algunos parámetros en cuanto a la preparación de los conductores para conducir en perfectas condiciones. Echar las agujas del reloj hacia adelante o hacia atrás una hora no parece importante en este campo pero si uno se para a pensar verá cómo sí que tiene implicaciones un poco más serias.
Así pues, ¿qué tienes que tener en cuenta para no sufrir un percance por el cambio del horario? Aquí debajo lo puedes comprobar.
Qué tienes que saber para evitar sufrir un accidente por el cambio de hora
Correr una hora hacia delante o hacia atrás debe ir acompañado en unos cambios superficiales de los hábitos en la conducción. Solo así será posible mantener el nivel de seguridad que se tenía anteriormente. ¿Qué es lo que debes hacer entonces?
Encender las luces una hora antes de la puesta de sol: Parece una ridiculez por haber suficiente luz natural pero en la práctica a esa hora ya no se distingue igual la distancia de seguridad respecto al coche que le precede.
Nivelar el haz de luz que emiten los faros: Además, es muy importante bajar un poco el nivel de los faros con el objetivo de no crear destellos en los coches que circulan delante.
Evitar conducir con la luz interior encendida: No suele haber muchos conductores que sigan esta manía pero lo único que conlleva es que tanto el mismo conductor como los demás sufran desniveles en la atención por la diferente intensidad en los puntos de luz.
Descanso y prudencia: En este caso se descansará una hora de más pero esto puede significar una mayor relajación en la actitud del conductor. Es por ello que conviene realizar descansos puntuales para estirar las piernas si lo que se hace es un trayecto largo.
Temperatura en el interior: Dado que se descansa más, el letargo puede producir que los reflejos sean lentos. Llevar un interior concentrado es perjudicial por lo que no hay que abusar de la calefacción en el habitáculo, abriendo las ventanas un poco para bajar algún que otro grado el ambiente interior.