”Hay dos cosas infinitas: el universo y la estupidez humana. Y del universo, no estoy tan seguro.” (Albert Einstein)
He querido comenzar este artículo con esta genial frase porque siendo sincero, es muy triste que ya no me sorprenda al ver la cantidad de vídeos que te puedes encontrar por la red de gente teniendo accidentes con sus coches de alta gama simplemente porque van picados con sus amiguetes o sólo para demostrar que son geniales pilotos llevándolos a más de 300 km/h.
Pues nada, como parece ser que el personal no aprende, aquí tenemos otro capítulo más de la enorme enciclopedia virtual de accidentes de tráfico provocados por inútiles carreras en los que cada vez tenemos más claro que no hay que ser inteligente para tener dinero y que la estupidez es como estar muerto; no sufres, pero es duro para quienes están a tu lado.
Como se puede observar perfectamente, nos encontramos con un Ferrari 458 circulando a toda velocidad porque parece ser va picado contra un Nissan GT-R. Al encontrarse con un vehículo que se dispone a ejecutar una maniobra de cambio de carril correctamente señalizado con el intermitente, nuestro intrépido piloto decide cruzar dos carriles para adelantardo, invadiendo así el carril donde tenemos a nuestro segundo protagonista, el cual se ve obligado a frenar bruscamente perdiendo el control del coche y estrellándose contra el inocente conductor anteriormente mencionado.
En fin, que tenemos aquí otro claro ejemplo para concienciar a todos aquellos que piensan que pueden hacer lo que les de la gana cuando van al volante, de que la carretera es un lugar en el que todos convivimos, y que si tener un accidente tiene sus consecuencias, más triste es sufrirlo por simplemente encontrarte en tu camino con gente temeraria. ¿Crees que servirá de algo? Yo también pienso que no.
