Las prisas son malas compañeras, ya lo dice el refrán. Lo que os traemos hoy es un claro ejemplo de este dicho. Sucedió la noche del pasado jueves en una carretera de la ciudad de Curitiba, en Brasil. En el video se puede ver a un Audi R8 conducir de una forma muy agresiva en una zona de tráfico denso, intentando hacerse paso entre los otros usuarios de la carretera. Cuando lo consigue, da rienda suelta a toda la potencia de su deportivo sin percatarse de que pocos metros más adelante se había formado un atasco.
El resultado es un frenazo que no puede evitar el accidente y el R8 acaba colisionando con un A5 Sportback que estaba en el atasco, adoptándo una postura de lo más rocambolesca, quedándose uno debajo del otro. Los desperfectos son de mediana consideración aunque no parece que el impacto haya afectado al chasis de ambos coches, por lo que son reparables. Esperemos que el conductor del R8 haya aprendido y no tengamos que presenciar más imágenes como éstas.