Para todos aquellos que hemos crecido con la saga 2 Fast 2 Furious podemos decir que nos marcó un antes y un después en nuestra pasión por los coches. Es cierto que las últimas entregas ha tenido más de acción y cada vez un menor protagonismo los coches pero aun así, han contribuido enormemente al desarrollo de nuestra afición.
Coincidiendo con la última entrega, la cual llega a los cines el próximo 18 de abril, una compañía aseguradora decidió hacer un estudio para calcular cuánto había supuesto en valor económico todos los destrozos que se pueden ver en las 7 primeras películas.
Para ello, contaron con la colaboración de Nacho Llacer, un experto que está, principalmente, especializado en vehículos antiguos. Las cifras, tras someter las más de 13 horas de sesión ininterrumpida que dura toda la saga, muestran un baremo que afecta tanto a los automóviles como a los edificios y demás desperfectos que se observan.
Esto es lo que debería pagar Universal Studios y Original Film por los desperfectos ocasionados
Tras una estimación que se detalla más adelante, se ha podido saber que podrían haberse producido unos costes que superaría la friolera cantidad de 521 millones de dólares, es decir, en torno a unos 488 millones de euros. Como es lógico, esta suma incluiría lo correspondiente a los automóviles, los edificios y demás estructuras.
Ahora bien, ¿qué es lo que ha acontecido tras 7 entregas en cuanto a destrucción? El balance es realmente llamativo; 169 automóviles resultados dañados durante el rodaje mientras que un total de 142 terminarían yendo directamente al desguace.
¡Aquí no acaba todo! De las cuantías anteriores, un máximo de 37 unidades serían las calificadas como ‘especiales’ por mostrar una distinción protagonista en la película. Sin duda alguna, el que mayor gasto hubiese entrañado para la franquicia debería ser el espectacular Lykan Hypersport, considerado como uno de los superdeportivos más caros del mundo.
Una de las curiosidades que se han podido descubrir es que es a partir de la quinta entrega cuando el coste en reparaciones se dispara. Coincidencia o no, lo cierto es que podría estar relacionado con el aumento de acción que se vivió desde ese momento, una de las principales críticas de los acérrimos del espíritu 2 Fast 2 Furious más primitivo.
De hecho, a la espera de la llegada de la octava entrega, fue la última la que se lleva el mayor protagonista en daños materiales. ¡Nada más y nada menos que 285 millones de dólares! Esto significa más de la mitad de lo presupuestado. ¿Podemos esperar que la que se estrena este mes de abril continúe con la tradición? Lo lógico sería pensar que sí.