Hace unos años era incuestionable la idea de tener un coche en propiedad. Sin embargo, un aumento del tráfico, de los costes que conlleva la tenencia de uno y las limitaciones que podrían comenzar en las grandes ciudades acerca de la limitación en su uso le hacen pensar a uno si lo mejor es tirar de transporte público, vehículo compartido o alquileres esporádicos.
Tirando de los baremos que ofrecen diferentes asociaciones y Hacienda estatal se puede llegar a una estimación orientativa para calcular si a uno le puede interesar la inversión en la compra de un coche o destinar dicho dinero para otro gasto importante.
¿Qué variables son las que interceden? Precio del seguro, número de kilómetros a realizar al año, vida útil del vehículo en cuestión, etc.
Coste de las pólizas de seguro
Según un estudio realizado por el comparador Kelisto, la prima anual media está situada en torno a los 640 euros, lo cual puede traducirse en un pago trimestral de 160 euros.
Sin embargo, es lógico pensar que todo dependerá del tipo de seguro contratado así como del modelo que se trate, pudiendo verse esta cifra aumentada considerablemente.
Precio del combustible y kilometraje medio anual
Pese a que hay un margen de unos céntimos entre el precio de la gasolina y el diésel, en los últimos años se ha reducido este gap como consecuencia de de una mayor demanda de los vehículos con tecnología diésel. Observando la tendencia media del mercado, se puede considerar que el precio medio del diésel y la gasolina ha sido de 1.25 y 1.33 euros respectivamente.
Según los datos de Matriculación de vehículos por valor del vehículo matriculado publicados por la Hacienda estatal, el parque móvil está compuesto por un 44% de vehículos con tecnología gasolina, mientras que el número total de los diésel es del 56%.
De un parque móvil total de 9.695.703 automóviles matriculados, se puede estimar que el coste medio de carburante por vehículo asciende a 0,065 euros por kilómetro recorrido, suponiendo que cada coche consume unos 5 litros cada 100 kilómetros, una medida quizás superior a lo que refleja la realidad.
Coste de mantenimiento y pago de impuestos y aparcamiento
Aquí es donde el coste puede variar más en función de si uno conduce un gasolina o un diésel. Tomando un coste de unos 5 céntimos por kilómetro recorrido, la media puede llegar a dispararse en función del kilometraje que se haga en la vida útil del mismo.
Por otra parte, el pago de impuestos, dependiendo de la potencia fiscal, puede hacerse una estimación ponderada de unos 1.500 euros para un total de unos 12 años, la media de años que tiene el parque automovilístico actual.
Una última partida de gastos que hay que añadir es el pago de la O.R.A y aparcamientos públicos, lo cual podría superar perfectamente los 500 euros anuales, una cantidad que dependerá de la tenencia de plaza de garaje propia, lugar de residencia o espacios de tránsito más habituales.
Coste total pasados 12 años
Teniendo en cuenta todas estas partidas, puede decirse que el coste de poseer un vehículo durante un total de 12 años podría superar un total de más de 40.000 euros, una cifra muy superior del precio de compra que la mayoría de los vehículos que se compran en el mercado. Sabiendo esta estimación por el tiempo pronosticado, ¿merece la pena?
Obviamente la respuesta tendrá que saldarse con la realización de un análisis coste-beneficio.