Los fabricantes de automóviles viven, como todos sabemos, de vender vehículos masivos, pensados para el común de los clientes, diseñados para ser fáciles de mantener, fáciles de conducir y con un diseño que le guste a todo o casi todo el mundo. Pero si es verdad que esos vehículos pensados para las masas en muchas ocasiones se venden gracias a la imagen de marca, que se consigue con victorias en competición o lanzando vehículos potentes, rápidos, con líneas deportivas y además, con precios no al alcance de cualquiera, al igual que su conducción.
Son esos coches los que perduran en el tiempo, los que muchos aficionados querrían cuanto menos, conducir durante uno buen puñado de kilómetros. No importa la edad del coche, si ha calado en los aficionados, será recordado siempre, algo que pasará con el tiempo con los modelos actuales.
”Los deportivos de hoy son los clásicos de mañana” dicen algunos, pero hay clásicos que ha día de hoy, siguen entre nosotros y se mantienen casi fieles por completo al concepto con el que se lanzaron y he aquí una selección de diez deportivos míticos que aún siguen fabricándose a día de hoy. En algunos casos, nos guiamos por lo que dice la marca, bien porque mantiene el “espíritu” del modelo clásico o bien, por ser una reinterpretación simplemente estética. En otros casos están en esta selección por puro derecho.
Prácticamente ningún coche de los aquí representados necesita presentación y los he colocado la selección según la fecha de su primer lanzamiento.
Chevrolet Corvette
El primer protagonista llega desde el otro lado del charco, desde Estados Unidos, pues el Corvette es el primer coche de esta selección que fue presentado. Era 1953 y el Chevrolet Corvette representaba la versión americana de los ligeros y ágiles roadster europeos.
Fue diseñado por Harley Earl y tras siete generaciones, todo parecido es pura casualidad. La evolución y el avance no perdonan y el actual Corvette, el “C7”, es el más avanzado y el más seguro, pero desde mi punto de vista, el más feo.
Aquel primer Corvette de 1953, el “C1”, se lanzó con un seis cilindros de 3,9 litros y 150 cv, el actual cuenta con un V8 de 6,2 litros y 450 cv. El primer Corvette, era un estricto roadster, el actual se presento primero como coupe…
Aunque eso si, es de los pocos que se ha fabricado ininterrumpidamente desde 1953 hasta hoy.
Mercedes 300SL – SLS AMG
Con el siguiente protagonista tenemos que “tirar” de imaginación y creer lo que la propia firma nos dice: ”es el sucesor espiritual del 300SL”. Ciertamente, en la imagen que ilustra este texto si que tienen bastante parecido, siempre salvando las distancias evidentemente.
El Mercedes 300SL se fabricó entre 1954 y 1957 y derivaba de la versión de competición o al menos empleaba las mismas soluciones. Sorprendieron sus puertas de apertura vertical que una vez abiertas, parecen las alas de una gaviota extendidas, por ello recibió el apodo de “alas de gaviota”. Dichas alas eran fruto de su chasis tubular que unicamente rondaba los 50 kg, pero ofrecía una rigidez muy elevada. Aunque también hay que destacar la inyección directa de gasolina, la columna de dirección regulable o la carrocería de aluminio en opción.
En cuanto al SLS AMG, representa el mismo espíritu del modelo original de los 50, pero nuevamente el paso del tiempo hace que las cosas haya que mirarlas con perspectiva. Al menos, si tiene cierto parecido y su presentación creó tanta expectación como en 1954. Es de los Mercedes más bonitos hasta la fecha y se encuentra al final de su vida comercial.
No obstante, el Mercedes “alas de gaviota” no es un modelo que se haya fabricado de continuo hasta hoy, sino que les separan más de 55 años.
Nissan Skyline
En esta ocasión, tenemos un modelo con el que, digamos, hay que guardar un respeto. No hay modelo de origen japones con tantos seguidores y tan acérrimos como el Nissan Skyline y la mitad de ellos se saben su historia al dedillo.
Aparecía por primera vez en 1955 bajo la firma Prince Co, que por aquel entonces fabricaba aviones, aunque en la imagen que tenéis más arriba no aparece. Estaba muy influenciado por el diseño de los coches americanos y poco se parece a cualquiera de las posteriores versiones. En la imagen, tenéis a todos los Nissan Skyline, pues en 1967 la firma japonesa absorbió a Prince Co.
Comenzó siendo un sedan de cuatro puertas, pero con el paso de las generaciones terminó siendo un deportivo “de tomo y lomo” cuyas últimas versiones son las más apreciadas por su estética, su rendimiento y sus posibilidades de preparación.
El Nissan GT-R es la última evolución de dicho modelo, pero perdió la denominación Skyline y fue el primero de todos que llegó a Europa oficialmente compartiendo con casi toda la saga, la tracción total y el motor turbo.
Jaguar E Type – F Type
En el caso de Jaguar nos ocurre como con Mercedes, tenemos que hacer uso de la imaginación y encontrar parecidos entre el mítico Jaguar E-Type y el nuevo, pero no menos bonito, Jaguar F-Type. Pero al contrario de lo que ocurre entre el Mercedes 300SL y el SLS AMG, en esta ocasión el único parecido entre ambos es que ambos son descapotables, propulsión y tienen un largo morro que oculta un motor potente.
Fue durante 1961, cuando Jaguar lanzó el E-Type, conocido como “XKE” en tierras yankees. Causo sensación e inmediatamente se convirtió en un mito. Su largo morro, sus curvas y las prestaciones prometidas hicieron del nuevo Jaguar un objeto de deseo que actualmente mantiene su aura de exclusividad.
Mucho después, en 2013, Jaguar lanza el F-Type, heredero espiritual del magnifico Jaguar E pero que estéticamente y técnicamente nada tienen que ver. De todos los modelos elegidos, es el que menos referencia hace al supuesto antecesor, sería más adecuado, quizá, mencionar al Jaguar E-Type Lighweight, aunque solo se fabriquen seis unidades, pues será exactamente el mismo coche pero fabricado hoy.
Fiat 500 Abarth
Muchos de vosotros estaréis pensando que no pinta nada un Abarth entre tanto aparato de prestaciones escandalosas, y quizá tengáis razón. Pero no quería dejar fuera una firma tan mítica como la creada por Carlo Abarth, pues a pesar de no contar con grandes potencias, sus creaciones podían poner en aprietos a más de un deportivo de renombre en una carretera de curvas.
Algo que con el Abarth 500 es bastante sencillo, siempre que no haya grandes rectas, pues es posible que los 27 cv del modelo original de 1963 y sus 120 km/h te dejen en ridículo. Mejor una tramo de rallyes con muchas horquillas donde más de uno preferirá no intentar seguirte o bien, un tramo por ciudad, donde los que hayan sido capaces de seguirte en las horquillas, acaben tirando la toalla.
Y con ese mismo espíritu renació la firma en 2007 como filial de Fiat, con el objetivo de crear las versiones más racing de los modelos italianos. El actual Abarth 500 es un de nuestros protagonistas, cuya estética es la más fiel a la original, al igual que la idea general, pues planteamiento poco tiene que ver, ya que el 500 “clásico” era un modelo barato, sencillo y sin más pretensiones que llevarte desde el punto A al punto B con el mínimo coste, pero el actual es un producto “chic” y de precio un tanto elevado, algo que repercute en la versión Abarth.
Ford Mustang
El Ford Mustang es otro de esos modelos con lo que hay que tener cuidado y meter la pata con los datos, pues la legión de seguidores que tiene en todo el mundo tardaran poco en “crucificarte”. No obstante, lleva fabricándose ininterrumpidamente desde 1964. Nada menos que 50 años, la información sobre el modelo es cuantiosa.
De su diseño se encargó Lee Iacocca junto a un comité especial, que tuvieron como inspiración, al igual que el Corvette, los ágiles modelos deportivos europeos. Y desde el primer momento fue un éxito rotundo, mucho más de lo que nadie pensó y como ejemplo, el primer dia de comercialización se hicieron 22.000 pedidos y se vendieron el primer año 417.000 Ford Mustang.
No todos los diseños del Mustang han gustado, han sido las últimas generaciones las que realmente han vuelto a calar en los seguidores del modelo y aunque conserva mucho parecido, el Mustang 2015, la última generación presentada y la primera que llega a Europa oficialmente, no termina de encajar en lo que todos los amantes del modelo esperaban. Más aún si cabe cuando recupera el motor de cuatro cilindros que no se usaba desde los años 80.
No obstante, y a riesgo de recibir alguna que otra critica, el nuevo Mustang me parece uno de los más bonitos.
Porsche 911
Hablar del Porsche 911 es hablar de uno de los mayores mitos del automovilismo. Es un modelo que desde su presentación en 1964, se a mantenido fiel a sus orígenes hasta el día de hoy, salvando algunos cambios necesarios ya sean por homologación o por necesidades técnicas.
Sigue manteniendo el motor descolgado por detrás del eje trasero, algo que es técnicamente arcaico, pero que Porsche ha conseguido que no resulte un escoyo, convirtiendo al 911 en uno de los mejores deportivos del planeta.
Los cambios más destacados que ha sufrido el modelo a lo largo de sus 40 años han sido principalmente por motivos de seguridad y homologación como ya se ha comentado, pero hay uno que en su día fue muy criticado: la adopción de una refrigeración por liquido en lugar de por aire, como tuvieron todos los Porsche 911 hasta la saga del 993 de los años 90. Es más, el Porsche 993 es considera el último “911 autentico”.
Aún y así, hay que alabar el trabajo de los ingenieros de Porsche pues han hecho de un coche con una arquitectura del siglo pasado, un referente en el sector de los deportivos.
Chevrolet Camaro
Volvemos a viajar a Estados Unidos para conocer otro deportivo mítico que se sigue fabricando hoy día, y nuevamente, está encuadrado dentro de los llamados “Pony Car”. Se trata del Chevrolet Camaro, estrenado el 29 de septiembre de 1966 y nacido con la intención de hacerle la vida difícil al Ford Mustang.
Al igual que aquel, tenía motores V8 de gran cilindrada y varias versiones, donde tenemos que destacar la Z/28, lanzada en 1966 como modelo del 67 y que era casi un kit de carreras.
Tuvo varias generaciones, siendo la cuarta la menos agraciada, aunque no por ello la peor ni tampoco resultaba un coche feo. Esta cuarta generación se fabricó hasta el año 2002, para volver a retomarse la fabricación del modelo en 2010, con una reinterpretación estética del original muy conseguida.
El más cañero del actual Chevrolet Camaro es, como no, el Camaro Z/28, cuya puesta a punto se ha desarrollado en el circuito de Nürburgring y cuenta con un motor V8 de 7 litros y 505 cv.
Dodge Challenger
A partir de aquí ya nos quedamos en Estados Unidos, pues nuestros dos últimos protagonistas son nacidos en aquellas tierras, como el que nos ocupa ahora, el Dodge Challenger, el último de los “Pony Car” lanzado en 1970.
Tomaba como base de partida la plataforma del Plymouth Barracuda y cuando salió al mercado tenía nada menos que nueve motorizaciones diferentes, desde 145 hasta 425 cv. En todos los medios americanos se puede ver como dicen que marco una época por estilo y potencia de sus motores destacando por encima de todos el Challenger T/A (Trans Am), la versión de calle del coche que competía en el Campeonato Trans American Sedan del Sport Car Club de América.
Se dejó de fabricar en 1983 para regresar nuevamente en 2008 con un diseño que reinterpretaba la línea original, algo que por entonces, estaba muy de moda. El “más gordo” de esta nueva generación es el Dodge Challenger SRT-8 con el V8 HEMI 392 (6,2 litros).
Dodge Viper
El Dodge Viper es el último en discordia de nuestra selección. Pero no es el útimo por ser el peor, sino porque llegó al mercado en 1991, así que podemos decir que se trata de un modelo joven, comparado con sus compañeros. Lo gracioso es que no he podido encontrar una foto de la primera y la última generación del modelo juntas, solamente ésta que podéis ver con la primera y la segunda generación, además, decoradas igual.
Fue también obra de Lee Iacocca, presidente del Grupo Chrysler durante los años 80 y hay quien dice que el AC Cobra fue su fuente de inspiración. Es mas, incluso el propio Carrol Shelby colaboró en el diseño inicial del Viper.
El Viper no era un deportivo normal, ni siquiera lo es a día de hoy. Querían hacer un deportivo que tuviera toda la esencia yankee en cuanto a motor, potencia, estética y prestaciones. Por ello, buscaron un propulsor que fuera brutal y lo encontraron en la división de transporte pesado de la propia Chrysler, un motor de camión/autobús. Es evidente que no se montó tal cual. Por entonces Lamborghini era propiedad de Chrysler y fueron los italianos quienes pusieron a punto el motor del primer Dodge Viper extrayendo 450 cv de sus casi 8 litros.
La segunda generación era más de lo mismo, con el mismo motor retocado, pero con 600 cv y prácticamente misma estética. 2008 fue el año elegido para el final del Dodge Viper, pero volvió cuatro años después con mucha más tecnología, una aerodinámica mucho más cuidada pero siendo prácticamente el mismo coche.
Desde Dodge aseguraban que el SRT Viper (como se puso a la venta) era un coche casi nuevo, muy evolucionado y realmente rápido, pero el motor seguía siendo excesivamente enorme para “tan solo” 640 cv y excesivamente parecido al original de 1991, además, estéticamente cambiaban algunos detalles. Es quizá por eso, por lo que las ventas no despegan y el stock se acumula. Triste futuro para el Dodge Viper, el último en llegar y posiblemente, el primero de toda la lista en marcharse.
