Mucho se ha dicho de los eléctricos. Que si electrodomésticos, que si insulsos y aburridos, etc. ¿Por qué tienen que sufrir la ira de aquellos petrolheads que no toleran el auge de una tecnología que reducirá la contaminación de las ciudades?
El estigma con el que deben convivir los vehículos eléctricos ejerce, aún a día de hoy, una barrera para que muchas personas se atrevan a comprar uno. BMW es una de esas compañías que busca animarte y prueba de ello es la presencia en su gama de los increíbles i3 e i8.
¿Creías que no podrían llegar a ser divertidos este tipo de coches? Este espectacular vídeo que podrás ver a continuación, cortesía de DPCcars, es la prueba definitiva que te convencerá. Únicamente hace falta el original i3 para que el próximo día le digas a tu cuñado que sí que es posible derrapar con un eléctrico.
Las imágenes que te harán cambiar de opinión sobre los eléctricos
¡Ojo! Y se pone como ejemplo un automóvil cuya estructura no es la más idónea para la realización de estos giros tan bruscos de volante. Sin embargo, pese a que está concebido para su desempeño principalmente en el medio urbano, no parece dársele nada mal las curvas embarradas.
A modo de exprimir al máxima las posibles aptitudes off road en un vehículo que está fuera de su ecosistema natural, se contó con la colaboración de unas manos expertas y conocidas dentro del mundo de los rallyes. Así pues, Rauno Aaltonen fue el encargado de ponerse manos para conseguir ir de lado con el modelo de la gama eléctrica de BMW.
Tal y como puedes apreciar en las imágenes, la presencia instantánea de la totalidad del par al pisar el acelerador se nota en cada curva. Esta mayor entrega de potencia permite al i3 girar sus ejes más rápidos para conseguir enderezar la trayectoria de forma más precisa en un menor tiempo.
Ejemplos como este nos hacen pensar cuánto tiempo le queda a la competición para adaptarse a las nuevas tecnologías. Sí, cualquiera de nosotros siempre preferirá la Formula 1 a la Formula E o el Campeonato WRC a una hipotética modalidad basada en modelos eléctricos pero qué crees, ¿se debería dejar que la innovación tomase las riendas o habría que mantener la tradición?
Aún parece que le queda una larga vida a la competición tal y como la vemos pero sí que es cierto que en los últimos años y, sobre todo meses, automóviles como el Rimac Concept One o el Tesla Model S en sus versiones más potentes han dejado en ridículo a la competencia de combustión.