Cada día, cientos de miles de niños van y vuelven del colegio en autobuses fletados por los los centros. Puedes imaginar, por tanto, que las probabilidades que tienen de verse inmersos en un accidente en carretera son como las de cualquier otro conductor. Disponer de una mayor estructura posibilita una mayor seguridad para los peques pero aún así, puede ocurrir una fatalidad si se dan una serie de acontecimientos.
Como sabrás, la legislación no incluía ningún apartado para hacer referencia a la instalación de cinturones de seguridad hasta hace relativamente poco tiempo. Allá por el año 2007 entró en vigor una ley que obligaba a los nuevos autobuses a incorporar los Sistemas de Retención Infantil (SRI) pero aún así, ¿qué hacemos con el resto de vehículos anteriores a esa fecha que se siguen utilizando como transporte escolar? Cada vez hay un mayor control pero aún así, la seguridad sigue siendo un tema que cuesta mucho explicar a todos los conductores.
Así es como surgió la idea de Kidy Bus Harness, el cinturón que sirve para mejorar la seguridad en los autobuses que no incorporan un cinturón de garantías o incluso que no dispone de ellos. ¿Qué puede aportar este sistema para reducir el riesgo de lesiones ante un accidente?
Kidy Bus Harness, el cinturón de seguridad para el transporte escolar
Euraslog es la compañía española que se ha hecho cargo de producción de este SRI. Es un invento traído directamente desde Bilbao y que se exporta a países de todo el mundo. Entre las principales ventajas destaca la facilidad de instalación del soporte, el cual se adapta al tipo de asiento. El material, se trata de una lona, es muy fácil de acoplar en cada uno de los asientos del autobús. Por ello, cuesta menos de un minuto quitar y poner el artículo en cada uno de los asientos.
Otro de los factores que provoca una mejora de este sistema respecto al empleado en la mayoría de los asientos con el uso de cinturones de dos puntos de anclaje es que éste dispone de un total de cinco puntos de anclaje. Como no podría ser de otra forma, obtuvo y posee la homologación otorgada por el Instituto Universitario de Investigación del Automóvil (INSIA).
Está especialmente diseñado para mejorar la seguridad de los niños que tiene un peso comprendido entre los niños de entre 15 y 36 kilogramos. Uno puede pensar que tanto anclaje puede provocar un efecto negativo si hay que salir del accidente de forma urgente. No obstante, con presionar un simple botón bastaría para que se soltasen todas las sujeciones para poder escapar a tiempo. Además, dicho botón está producido de tal forma que no sea posible presionarlo para un niño ya que se debe ejercer una fuerza en torno a los 5 kilos. Con ello, se evitaría que los mismos niños se desatasen de forma voluntaria o accidentalmente.
Como puedes imaginar, este tipo de soluciones pueden salvar vidas en un hipotético accidente. Apenas suponen un kilo y medio de peso cada una de las unidades y sin embargo, son capaces de mantener sentado al niño, garantizándole una seguridad mucho mayor que la que ofrece cualquier tipo de autobús de hoy en día.
