El circuito de Nürburgring, que trazado más mítico y que de seguidores a lo largo y ancho del mundo ha ido logrando. Lo tiene todo; un trazado complicado, con muchas curvas de todo tipo, paisaje que hace pensar que estás en una carretera de montaña y riesgo, mucho riesgo si de verdad quieres ir rápido. Esa es la parte que más atrae, el riesgo. Además, en el Nürbugring se puede ver toda clase de ‘piques’ entre coches y una variedad de vehículos rodando que en ocasiones, asombra, solo tenéis que leer el artículo de mi compañero Álvaro titulado ‘Nürburgring, o donde ir a quemar adrenalina sin importar el vehículo que tengas’ para poder apreciarlo.
Por ello, el vídeo que os traigo a continuación puede parecer lo más normal del mundo, pero en realidad, no lo es tanto. En el, podrás ver como un Renault Mégane RS persigue con aparente facilidad a un Ferrari 458 Speciale, que le saca casi 400 cv de diferencia y además, pesa únicamente 1 kg más, siendo 1.469 kg para el Renault y 1.470 kg para el Ferrari. Échale un ojo al vídeo…
Es evidente que el Mégane RS, por muy racing que sea, no tiene oportunidad contra el 458 Speciale es un trazado como el de Nürburgring. Se aprecia claramente cómo el Ferrari se marcha irremediablemente en las rectas y en las zonas rápidas, aunque parece que al conductor le dan un poco de respeto las curvas, no cómo al del Renault que cuadra casi todas las trazadas y no parece titubear ni un segundo. También hay que reconocer que el tráfico ayuda a que el Ferrari no se escape en exceso, aprovechando la ocasión el conductor del Mégane RS para pegarse bien pegado a los escapes del 458 Speciale.
Claramente, es una pelea muy descompensada. El Renault Mégane RS tiene un motor de dos litros turbo con 265 cv, mientras que el Ferrari 458 Speciale tiene el V8 atmosférico más potente que ha fabricado Ferrari para calle, que ya es decir mucho. Es un 3,5 litros que declara 605 cv. En cuanto a prestaciones, el Renault hace el 0 a 100 km/h en 6 segundos y alcanza los 254 km/h y el Ferrari completa el sprint en 3 segundos y puede llegar a los 325 km/h.
