Cuando uno contrata un Safari en África debe saber qué posibles consecuencias puede uno tener en una de las escapadas. Mientras que un día puede ser nefasto en cuanto a material fotográfico, hay días en los que la batería de la cámara queda descargada por la multitud de instantáneas que se recogen.
Aún así, pocas imágenes pueden ser mejores que las recogidas recientemente en una de las rutas. Cruzarse con un rinoceronte es algo que no se puede conseguir todos los días. Si además está cabreado e intenta desahogarse con la carrocería del coche en el que te encuentras… Todo hace que la aventura sea mucho más emocionante y en ciertos casos podría llegar a ser hasta divertida.
Esto es justo lo que ha pasado recientemente en una excursión. Una caravana de varios vehículos se disponía a seguir con la ruta cuando un rinoceronte adulto apareció en escena. ¿Qué es lo que ocurrió? Las imágenes no tienen desperdicio y muestran a la perfección cuál puede ser el comportamiento de un animal de estas características en una situación instintiva.
Un rinoceronte la toma con uno de los vehículos de la caravana
Sucedió en unos pocos segundos. El animal, al percatarse de la presencia de unos extraños y posibles enemigos territoriales, comenzó a acercarse en una actitud desafiante. Tras ver que seguían en el mismo lugar sin moverse, decidió que tenía que acabar con el desafío atacando con su potente cuerno de la cabeza.
Corriendo a más de 50 km/h y teniendo una masa superior a los 1.000 kilogramos la fuerza con la que impacta en la carrocería de acero es bestial. Como es lógico, este tipo de vehículos disponen de todo lo necesario para soportar las embestidas de cualquier animal en libertad pero nunca es posible alcanzar un nivel de seguridad como para garantizar la integridad de los ocupantes.
Afortunadamente, el todoterreno pudo reanudar la marcha de nuevo sin haber sufrido daños estructurales. En relación a los ocupantes que viajaban dentro del mismo, es importante destacar que no hubo que lamentar ningún herido.
El Toyota Land Cruiser mostró su valía en este tipo de situaciones. La verdad es que no es ninguna sorpresa, uno ya sabe de qué pasta está hecho uno de los mejores 4×4 producidos por la industria del automóvil. Esta anécdota no hace nada más que llenar un nuevo capítulo en la longeva lista de historias vividos en el japonés.
Ya se conocía de lo que era capaz pero jamás se había podido ver en directo qué es lo que ocurría en la chapa de un vehículo que, teóricamente, está preparado para aguantar tratos como el recibido por parte del rinoceronte.
En las imágenes solo se puede observar un par de embestidas pero todo hace pensar que podría haber recibido alguna más. No es la primera vez que ocurre un suceso de estas características. Hace unos días ya se tuvo conocimiento de otro rinoceronte con la misma reacción instintiva, golpeando otro vehículo y pudiéndose ver en vídeo toda la escena del suceso. Tampoco en aquella ocasión hubo que lamentar un solo herido en el ataque.
