Por norma general, soy una persona a la que le gusta la tecnología en los coches, me gusta la evolución en los automóviles y todos los sistemas electrónicos enfocados a la seguridad. Pero en ocasiones, pienso que los fabricantes nos ven como unos patanes y peligrosos individuos que se ponen al volante de sus creaciones para hacer cundir el pánico. Solo así se explica la existencia de sistemas que aparcan el coche solos, te lo sacan del aparcamiento también solos, corrigen trayectorias por su cuenta y riesgo, o incluso, empiezan a circular sin que tengamos que hacer absolutamente nada, la tan discutida “conducción autónoma”.
Cosas que también pienso yo cuando veo noticias como la que han publicado en World Car Fans, donde comentan que una mujer británica de 28 años ha suspendido el exámen teórico de conducir 110 veces. ¡¡110 veces!!
Además, cada vez que pasó por el exámen tuvo que pagar 31 GBP, unos 39 euros. Así que haciendo la cuenta, son 3.410 libras esterlinas, 4.312,08 euros al cambio. Vamos, que ha pagado la entrada de un coche nuevo. Y todavía, en caso de aprobar, le quedaría el exámen práctico, que en Inglaterra consta de una prueba de 40 minutos y cuesta 62 libras, 78,40 euros.
Y antes de que empecéis a decir barbaridades como “mujer tenía que ser” o cosas por el estilo, decir que tras ella está un hombre de 30 años que ha suspendido en 86 ocasiones y todavía no puede conducir legalmente.
Según cuentan en World Car Fans, en Inglaterra la media de aprobados es del 65,4% y hay un hombre de 40 años que tiene el récord de suspensos con 37 veces.
Un ejemplo a seguir en lo que a constancia se refiere, no así de superación.
Yo lo que no entiendo es como después de 110 veces no se sabe el temario.
Seguro que no se ha leído ni una sola vez el manual y sigue empeñada en aprenderse de memoria los test. Cuando yo me saqué el carné había una chica empeñada en aprobar el teórico siguiendo esa misma técnica. Ya se sabe que un tonto es aquel que sigue haciendo lo mismo esperando resultados diferentes, con lo que imagino que quince años después ella siga en la autoescuela esperando aprobar alguna vez.
[…] margen de casos extremos de determinadas personas que han necesitado decenas de prácticas o que se han presentado un centenar de veces al examen sin conseguir aprobarlo, hay una realidad que FACUA se ha encargado de contrastar mediante un estudio: aprobando a la […]