Como en prácticamente cualquier segmento en el que compiten, las marcas premium alemanas gozan de una situación privilegiada. Muchos han sido los intentos del resto de fabricantes para quitar el ansiado lugar que ocupan en el sector pero siempre, ya sea por uno u otro motivo, terminan alcanzando los objetivos mínimos en ventas para mantenerse líderes.
Uno de esos segmentos que tradicionalmente han dominado, el de los coupes basados en la berlina media de la gama, va a dar la bienvenida a un nuevo integrante, el Infiniti Q60. Llega justo a tiempo tras explotar la firma japonesa durante los últimos años el diseño del modelo actual, mucho más contenido en cuanto a imagen se refiere. El paso de los años ha hecho mella en las ventas y esta actualización servirá para saber si logra hacerse con un hueco importante en un nicho de mercado dominado por alemanes y por algún que otro competidor japonés, el Lexus RC Coupe. ¿Tendrá la aceptación necesaria por parte del juez llamado consumidor?
Infiniti Q60, el concept se hace realidad y llega con fuerza para asaltar el mercado
Lo primordial para entrar de lleno por las cuotas de mercado en segmentos con rivales muy duros como este es disponer dentro de la oferta motores que no se queden cortos. Así pues, en su carta de presentación no faltará un propulsor de dos litros turboalimentado y 211 CV y uno de tres litros V6 con doble turbo en dos variantes diferentes, una que rendirá 304 CV mientras que otra mucho más aspiracional gozará de tener 405 CV de potencia bajo el pie derecho. Obviamente, la decisión de uno u otro variará según lo generosa que sea la cartera del cliente y de la experiencia que se busque en la conducción.
Sin datos oficiales en cuanto a prestaciones, se espera que se sitúen en los mismos intervalos que sus competidores, es decir, el Audi A5, el BMW M4, el recientemente actualizado Mercedes Clase C Coupe y el Lexus RC Coupe japonés. Eso sí, uno de los apartados que puede presumir la última creación de la compañía es de ofrecer la carrocería más óptima desde el punto de vista de la resistencia aerodinámica. Con un coeficiente aerodinámico (Cx) de 0.28, podría plantarle cara a los rivales pese a disponer de una potencia unos CV más baja.
Este modelo en particular es el primero de la compañía japonesa en ofrecer soluciones activas para refrigerar el motor. Con unos sensores que miden la velocidad en todo momento, es capaz de accionar un mecanismo parecido al que dispone el Jaguar F-Type en el alerón trasero para provocar una mayor o menor circulación bajo el capó con el objetivo de reducir los consumos y ofrecer una temperatura idónea al propulsor. Además, contribuye a que dicho coeficiente aerodinámico sea uno de los más bajos del mercado.
Llegará a los concesionarios de Estados Unidos a mediados de año y todo parece indicar que llegará al ‘viejo’ continente en la segunda mitad del año 2016. Por otra parte, no se descarta que traiga acompañada una motorización diesel por tener una mayor afinidad entre los consumidores europeos. Sea lo que fuere, se espera que se convierta en una seria alternativa a los cuatro integrantes con mayor demanda en este segmento.