No hay que ser ningún ‘cerebrín’ para saber que las grandes ciudades cada vez están más pobladas de SUV´s o también conocidos como ‘subebordillos’ por las pésimas aptitudes off road que poseen. Jeep, hasta hace unos meses, era una de esas compañías que evitaba a toda costa basar su estrategia competitiva en el desarrollo de vehículos urbanos.
Esto no quiere decir que un cliente de un Jeep no pueda acceder a los centros urbanos sino que más bien, el hecho de conducir uno podría librarse de algún que otro apuro en pistas y terrenos escarpados. Eso se ha acabado puesto que desde hace únicamente unos meses, un tal llamado Renegade ha hecho sucumbir a la compañía propiedad de Fiat Chrysler Automobiles en su idea y concepción de todoterreno. Pero a decir verdad, ¿son tan malas las noticias del descubrimiento de este nuevo segmento? Pongámonos a analizar qué ha ocurrido en el último año.
Mercado de Jeep en el 2015 con records de ventas e ingresos incluídos
Posiblemente recordarás la historia de Cayenne y los datos económicos. La marca de históricos deportivos no podría haberse salvado de la quiebra si no fuese por la idea brillante que tuvieron allá por los primeros años del siglo XXI. Algo parecido podría suceder en un futuro con Jeep. Hace un tiempo, fuentes internas de FCA declararon que iban a realizar una serie de ajustes y estructuraciones que probablemente afectarían a la filial de todoterrenos. Ahora, vistos los resultados en ingresos y ventas, se habrá esfumado cualquier duda de Jeep.
El año que acabamos de dejar atrás se ha convertido en uno de los más importantes para la empresa. Tanto es así que han batido record en un área en la que siempre han flojeado. Pese a que aún el grueso importante de las ventas se concentran en América del Norte, el mercado europeo ha conseguido un total de 88.200 unidades vendidas, es decir, un 132,2% más que en 2014.
La parte negativa es que casi la mitad de los vehículos vendidos en Europa como en Oriente Medio y África son unidades de la última creación la empresa, el Jeep Renegade. Más que negativa podría traducirse como menos positiva puesto que se trata del modelo acceso a la gama de la compañía. ¿Qué lectura podría hacerse de estos datos?
Las normas medioambientales están siendo cada vez menos laxas y modelos como el Wrangler deben introducir cada vez más mejoras para seguir siendo una opción viable de cara a su comercialización. Ello, obviamente, necesita de recursos económicos para poder hacer tales inversiones y por tanto, podríamos ver en el Renegade un nuevo modelo ‘salvador’ del resto de la familia Jeep. Este hecho guarda una relación con lo ocurrido con el Land Rover Defender, el cual ha finalizado la producción recientemente a causa de una legislación no favorable en términos de contaminación.
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Si para mantener la identidad de una compañía es necesario romper con los valores de la estrategia competitiva y diseñar lo que el mercado demanda, adelante. Volviendo a hacer analogía de lo comentado unas líneas más arriba, prefiero seguir disfrutando del Porsche 911 si ello implica la venta de los Cayenne o los Macan. El mismo ejemplo podría servir para el fabricante norteamericano, poder fabricar el Wrangler en los próximos años sería únicamente viable si la línea de producción está abierta a modelos menos aspiracionales en conducción off road.