la figura del 911 y los coches deportivos. Pues bien, gracias a esa extraña decisión, hoy podemos seguir disfrutando de modelos con una trayectoria legendaria.
Lamborghini se encuentra en una situación un tanto parecida. Dejando a un lado la solvencia económica, se observa como marcas situadas alrededor están considerando como una opción más que probable, la adopción de fabricación de un SUV. De este modo, el actual CEO de la marca de deportivos italiana, Stephan Winkelmann, ha asegurado que este proyecto se ha convertido en prioritario abandonando y dejando a un lado la idea de producción del Asterion, un coupé 2+2.
¿Por qué un Lamborghini Urus y no un Asterion?
En primer lugar, se debe estar de acuerdo en un punto, Lamborghini es un fabricante excéntrico. La filosofía que emplea la marca en el diseño de sus automóviles es de corte recto, figuras con bordes poco redondeados. Se caracteriza por una imagen afilada que se palpa tanto en el aventador y el Huracán, así como en el resto de concepts y prototipos.
Por ello, asaltar nuevos horizontes es una barrera más fácil de superar para esta empresa que surgió gracias a un cliente insatisfecho de su principal competidor, Ferrari. Como principal punto a favor para la apuesta por el SUV es el auge de este segmento en cuanto a ventas y demanda. Numerosas empresas de lujo están valorando la incorporación de este tipo de coches a sus líneas de producción pero suelen ser de un corte mucho más elegante y noble. Lamborghini debe estar pensando que precisamente el estilo de diseño de esta marca marcará la diferencia para la obtención de una gran porción de cuota de mercado.
Otro motivo que podría estar relacionado con el abandono del Asterion podría estar relacionado con la marca del cavallino rampante. El Ferrari FF está basado en la misma estructura. Es un coupé 2+2 con más de 600 CV que ofrece ”practicidad’ y deportividad. Por tanto, se puede considerar que un nicho de mercado tan pequeño solo podría acarrear pérdidas muy importantes para la filial del grupo VAG.
Un último punto que podría haber inclinado la balanza a favor del ‘todoterreno’ sería la adopción de economías de escala. Dado que compartirá estructura con el futuro e inminente Audi Q7, los costes de producción se reducirán, obteniendo un mayor margen por cada Urus vendido. Este, pues, parece una de las piezas clave por las que se ha terminado escogiendo la opción del SUV en detrimento del coupé.
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No es la primera vez que Lamborghini sorprende con noticias rocambolescas. Ya en el pasado, sacaron un todoterreno denominado LM002 que bien se asemejaba a un Hummer H1 descafeinado. A diferencia de lo que opinarían muchos amantes de la marca del toro, esta apuesta es algo que rompe con lo establecido, que se dirige a un público muy exclusivo, con una filosofía muy personalidad fuerte. Lo que está claro es que el proyecto no deja indiferente a nadie y dará que hablar durante los próximos meses.
