Por muy radicales sean algunos de los modelos que las marcas diseñan y presentan al público general, siempre habrá algún que otro preparador que se atreva a meterle mano y hacer un estilo mucho más personalizado. Además, dentro de las mismas preparaciones, las hay más discretas y más extravagantes. Dentro de este segundo grupo, algunos de los prototipos que remozan bien podrían haber aparecido en épocas anteriores, de los años setenta y ochenta.
En el caso que se presenta hoy, no se da esta circunstancia pero lo que sí que es verdad es la fama estrafalaria con la que se caracteriza el preparador. No es ni más ni menos que Mansory, en cuyo ADN tiene bien tatuado el símbolo de lo radical y llamativo.
Pues bien, la última creación con la que han despertado para bien o para mal el mundo de las modificaciones ha sido ni más ni menos que el Mercedes Clase G63 AMG. Pero, ¿qué tiene de especial este gigante de las carreteras?
Personalización y carácter en el Mercedes G63 AMG by Mansory
La última creación de Mansory, el Mercedes Clase G63 AMG, ha sido bautizada com Sahara Edition. Dicho nombre ya vislumbra qué intenciones pretenden los chicos de la marca de preparaciones. Enfocado a su uso en el desierto, principalmente llamará la atención en países árabes donde los petrodólares no serán problema para pagar los 770.000 euros que valen los cambios llevados a cabo. Pero además, habrá que estar atentos para ver si otros ‘ricachones’ como Dan Bilzerian por ejemplo, se dan un capricho más para añadirlo a sus colecciones.
Comenzando por el motor, hay que destacar los cambios producidos en la configuración, así como el cambio de algunas piezas, con el fin de incrementar la potencia hasta los 840 CV y 1.000 Nm de par máximo, sacados de un bloque V8.
El resto, pertenece todo a cambios en las estética como en el peso. Se ha utilizado la fibra de carbono para reducir unos cuantos kilogramos. En cambio, se ha incrementado la anchura del vehículo unos 8 centímetros con el fin de otorgar una figura exterior más agresiva en su conjunto. Eso, unido a la pintura de ‘camuflaje’, impresiona y transmite de un modo parecido la sensación que despierta su hermano mayor, el Clase G63 AMG de 3 ejes, la versión más bestia y más rocambolesca de este todoterreno.
Para acompañar y terminar de rematar un estilo mucho más radical, Mansory ha decido calzar en este Clase G unas llantas de 22 pulgadas para dar cabida a unas gomas de 305/35. Además, se ha sustituido el capó por otro más musculado y se ha cambiado la insignia de la estrella por la inicial del preparador. Por último, a modo de colofón final, se le han adherido al techo 4 focos de grandes dimensiones para alumbrar las carreteras desérticas si se te hace tarde a mitad del desierto.
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En Oriente Medio, los gustos son muy diversos. El precio es lo que menos importa. Se tiene el dinero y el cliente lo que busca allí es la diferenciación. Para hacer alguna que otra escapada por las dunas del desierto y pasearse por las calles de Dubai, cuanto mayor entusiasmo despierte y menor sea la discreción que levante, mejor. De acuerdo que dependerá de cada persona, pero por regla general, si te compras un Clase G63 AMG, muy desapercibido no querrás pasar.