Como ya sabes, Mercedes fabrica un todoterreno que continúa siendo un emblema desde el primer año de su fabricación, 1979. Obviamente, me estoy refiriendo al Clase G, un ‘trotamundos’ con unas cualidades off road increíbles. Dado el éxito que ha tenido pese a su destacado precio, lo cierto es que en el año 1997 pensaron, ¿por qué no creamos algo más comercial? Así es como surgió el ML. Casi dos décadas después, estamos en un momento en el que la plantilla de SUV´s en la firma de la estrella es amplia. Además, con la introducción de un modelo coupe pero carrocería SUV, los nombre comenzaron a distorsionarse y era difícil nombrarlos.
Para acabar con las denominaciones confusas, el fabricante germano ha acabado en este 2015 con las siglas que definían a algunos de los modelos por otras. Pero, ¿qué modelos se han visto involucrados en esta reestructuración? Veámoslo.
Mercedes GLA
Este modelo no ha sufrido ninguna modificación. El motivo principal ha sido que su incorporación a la familia SUV se llevó a cabo para luchar contra rivales de acceso a gamas en este tipo de vehículos. De hecho, está fabricado sobre la base del compacto Clase A.
En comparación con sus hermanos mayores, se observa como este SUV tiene limitaciones más que evidentes a la hora de salir por pistas y terrenos un poco más complicados.
Mercedes GLC
Es el sustituto del GLK. A simple vista, podría pasar un tanto desapercibido y tener una ‘mancha’ a la hora de comprarse. Puede verse como un ‘quiero y no puedo’ de cara al GLE. Sin embargo, es un coche con una cierta desenvoltura en pistas y terrenos un poco más complicados a los que una berlina ya no podría acceder. Posee la opción de introducir la tracción integral en todas sus variantes.
Estéticamente, tiene un cierto aire al diseño también impreso en la línea del Clase E Estate, sobre todo en la parte trasera. Además, la carrocería está disponible en 3 variantes, la convencional, la Exclusive y la AMG. En cada una de ellas, la silueta mostrará una base en función de lo escogido, es decir, una imagen más tradicional o más deportiva.
Mercedes GLE
Este modelo es el que mayor confusión puede generar debido a las modificaciones que se han producido en un corto periodo de tiempo. En este intervalo, ha pasado de ostentar el nombre de ‘ML’ a ‘GLE’, pasando por ‘M’. Además y, por primera vez, incluye dos variantes disponibles, la versión SUV tradicional y la carrocería coupe. Básicamente, se trata de dos modelos totalmente diferentes pero que comparten definición para acortar la gama. De hecho, en otras marcas rivales como BMW, sí que categorizan ambos modelos con diferente nombre, siendo el X5 competidor del GLE SUV y el X6 del GLE coupe.
Un aspecto a destacar es la presencia, en ambas modalidades de carrocería, de la adecuación deportiva del preparador AMG que acostumbra a verse en todos y cada uno de los modelos de la firma germana. Todo sea por no quedarse atrás ante su competencia, también bávara, con los modelos X5 M y X6 M.
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El resto de las versiones off road mantienen las mismas nomenclaturas que poseían antes de este revolucionario cambio, es decir, el lujoso GL y el histórico G seguirán denotándose de esta forma. Se puede pensar que este cambio se debe a que la Clase G es el eje principal de los vehículos todoterreno de la firma alemana. Además, que se utilice la letra G no es ninguna casualidad, puesto que es la primera letra de la palabra Geländewagen, la cual quiere decir ‘SUV´s en alemán. Así pues, destapado el misterio, lo que buscan es tener una mayor relación entre el nombre y lo que buscan expresar de cara a lo que pueden ofrecer.