Elon Musk, tú me caías bien…

Voy a dar por sentado que todos conocéis a Elon Musk y que sabéis de sus ‘aventuras’ en el sector del automóvil. Un tipo que personalmente me caía bien, y dejo bien claro que ME CAÍA, ahora mismo no puedo ni verle. Pero no porque tenga una cuenta bancaria que ya me gustaría tenerla a mi, ni porque sea un tío de éxito, no puedo ni verle por sus últimas declaraciones. Según este señor, en un plazo de cinco o seis años máximo, tendremos coches autónomos por las carreteras y en cosa de veinte años, los vehículos conducidos por humanos serán prohibidos siendo sustituidos por coches de conducción autónoma.

Yo entiendo que este caballero, el señor Elon Musk, se gane la vida con la tecnología y el software. De hecho, gente como él ha permitido que pringadillos como yo podamos tener un soporte para contar lo que nos pasa por la cabeza como es el caso, pero sacar los coches convencionales de la carretera para poner ‘sus’ coches autónomos, porque no dudo en ningún momento que su objetivo es vender Tesla a cascoporro, hay un trecho. Para empezar, existen ciertos temas legales que habría que estudiar para ver como son solventados y no es nada fácil. Además, que la tecnología no está aún desarrollada completamente.

No obstante, Musk espera lograr plena autonomía en sus coches en un corto espacio de tiempo, siendo 2015 el año en que llegará, según él, a un 90%. De hecho, hace unos días, anunciaban la nueva actualización del software del Tesla Model S, un coche que se actualiza como las aplicaciones de los teléfonos móviles, el autentico ‘smartcar’. En ésta nueva actualización, la 7.0, se incorporará un modo de piloto automático que podrá ser usado en autopistas y que hará que el coche nos lleve por su cuenta sin que nosotros hagamos nada. Para ello usa cámara de vídeo, radar e incluso sonar para detectar lo que hay en la calzada. Disponible dentro de tres meses por cierto.

Según aseguró en otras declaraciones, la Inteligencia Artificial encargada de conducir los coches, será mucho más eficiente y segura que cualquier conductor, tildando los coches convencionales de peligrosos. Pero yo quiero que viajéis conmigo al año 2014, estamos cerca todavía así que será un viaje corto, y asistáis a una de la muchas convenciones en las que Elon Musk se dejó ver. En una de ellas, hizo unas declaraciones bastante interesantes:

Debemos tener mucho cuidado con la IA ya que supone nuestra mayor amenaza existencial. Con la Inteligencia Artificial estamos invocando al demonio.

Ahora parece que el demonio no tiene los cuernos tan largos, aunque si debe tener el bolsillo lleno de billetes verdes. Pero atención, porque estas declaraciones son poca cosa pues en el mes de agosto, llegó a decir que las Inteligencias Artificiales super inteligentes son más peligrosas que las armas nucleares.

¿Que pretende con estas idas y venidas? Yo creo que busca repercusión y hacerse todavía más famoso de lo que es. En caso contrario no entiendo porque se lleva la contraria a si mismo, porque un coche autónomo necesita una Inteligencia Artificial más o menos desarrollada para solventar ciertos problemas que surgen durante la conducción. Necesita pensar y decidir con cierta facilidad y rapidez y eso, Elon Musk lo sabe de sobra.