Podríamos estar de enhorabuena al ver que ha salido un anuncio para comprar un Bugatti muy especial, concretamente un EB110 pero tristemente, hemos vuelto a poner los pies en la tierra al ver el precio final que hay que pagar para hacerse con esta reliquia, nada más y nada menos que 1,8 millones de dólares.
¿Es justo un precio tan desorbitado habiendo otras leyendas del automovilismo mucho más económicas? Como todo en esta vida, la decisión es personal y cada uno valorará cómo decide gastarse el dinero. ¿Quiere decir, por tanto, que es un coche sobrevalorado? Obviamente que no, con un diseño rompedor, era capaz de registrar unas prestaciones de infarto, tanto para la época como para los tiempos en los que vivimos.
¿Qué hace tan especial a este Bugatti?
Podría decirse que es un claro perteneciente a la escuela que también tenía como destacado alumno al mítico McLaren F1, el mismo que marcó una época y ha tenido un sucesor que actualmente ocupa uno de los tres escalones en el nicho de los hiperdeportivos híbridos.
Su chasis fabricado en aluminio y fibra de carbono, unido al empleo de las mejores técnicas y materiales de fabricación, hacían de este coche un deportivo diferente, de esos que se quedan clavados en la memoria de cualquier seguidor senior de esta industria.
En sus cinco años en los que estuvo de producción (1991 – 1995) se fabricaron únicamente 126 unidades. Teniendo en cuenta que de esa tirada inicial se habrá quedado alguna unidad en el desguace por accidente, se puede considerar a este icono de la marca francesa como una edición limitada, con todo lo que conlleva.
Otro motivo que podría justificar este precio tan alto en comparación con otros modelos históricos podría ser el significado de su producción. Siendo el año 1991 el de su presentación, se escogió una fecha que hiciese honor al nacimiento del fundador de la marca Ettore Bugatti. Precisamente de ahí es de donde viene el nombre EB110, EB por las iniciales del empresario italiano y 110 por el número de aniversario que se cumplía.
Pero, ¿cómo podría conseguir alcanzar los 100 km/h desde parado en solo 3,6 segundos? Muy sencillo. Con un diseño óptimo que permitía obtener una buena puntuación de Cx y un motor V12 de 3.5 litros que conseguía extraer hasta 553 CV de potencia a 8.000 rpm, lógicamente podría pensarse que tampoco sería impensable pensar que superase los 330 km/h. Hasta aquí la versión ‘normal’, la cual es la que se ofrece en el anuncio pero además, se produjo una variante denominada ‘SuperSport’ que elevaba la potencia final hasta los 600 CV, rozando los 350 km/h de velocidad máxima.
Teniendo en cuenta que esta empresa se ha convertido en una compañía capaz de batir records en presupuesto de desarrollo y prestaciones, sería una gran inversión de cara al futuro pero, ¿es tan fácil contar con tanta liquidez en la cuenta corriente? Y aún más, ¿podrías hacer frente al mantenimiento? Únicamente posee 60.000 kilómetros recorridos pero debe tener unos costes en seguro, cambio de piezas cada cierto tiempo, etc. que asusta a cualquier potencial poseedor.