El Porsche 911 GT3 es la versión más radical de la gama 911 y tradicionalmente siempre ha sido un vehículo de competición con los elementos de confort y seguridad estrictamente necesarios para poder ser un vehículo matriculable. La última generación ha cosechado muy buenas críticas a pesar de los problemas de fiabilidad graves que está sufriendo desde hace unas semanas.
La última versión de este radical deportivo ha incorporado como principales novedades respecto a la generación anterior un tren motriz extraído directamente del Porsche 911 GT3 Cup de competición, una caja de cambios PDK de doble embrague y la novedad más comentada, un eje trasero direccional, siendo el primer Porsche en incorporar un sistema de este tipo.
Desde Porsche afirman que este sistema mejora la maniobrabilidad a baja velocidad y la estabilidad en conducción deportiva, dando una mayor agilidad al 911 GT3. Hasta el momento solo habíamos visto este sistema en vídeos promocionales, pero no habíamos tenido la oportunidad de ver su funcionamiento en detalle.
Como podéis ver en el vídeo, el sistema consiste en dos actuadores electromecánicos en lugar de los brazos de control convencionales en la parte izquierda y derecha del eje trasero. Estos actuadores pueden girar las ruedas hasta 2,8 grados dependiendo de la velocidad.
El eje trasero direccional del Porsche 911 GT3 tiene dos modos de funcionamiento dependiendo de la velocidad. Por debajo de 50 Km/h, si las ruedas delanteras están giradas, el sistema gira las ruedas traseras en la dirección opuesta. Esto equivale a una reducción virtual de la distancia entre ejes de 250 milímetros aproximadamente, lo que da una agilidad inigualable al 911 GT3 en tráfico urbano y curvas lentas.
Por el contrario, si circulamos por encima de 80 Km/h, las ruedas posteriores giran en el mismo sentido que las frontales, aumentado de forma virtual la distancia entre ejes en unos 500 milímetros, dotando al vehículo de la mayor estabilidad a alta velocidad. Este sistema también mejora la respuesta del coche ante los cambios de dirección, ya que al tener dirección en ambos ejes, las reacciones del coche ante cambios en la dirección son más rápidas.
Como siempre nos gustaría conocer vuestra opinión. ¿Qué os parece el sistema de dirección del Porsche 911 GT3? ¿Creéis que algún día se populizará lo suficiente como para ser montado en la mayoría de automóviles?
