A lo largo de la historia del automovilismo tenemos multitud de coches míticos que marcaron una época y que dejaron un recuerdo imborrable en la memoria de los aficionados. El vídeo que os traemos hoy está protagonizado por uno de esos coches de leyenda, el RUF CTR “YellowBird”.
RUF es un fabricante conocido por construir sus propios coches utilizando como base los chasis de modelos de Porsche, realizando mejoras enfocadas a mejorar el rendimiento y convertir sus vehículos en auténticos coches de circuitos con los que es posible circular por carretera. Uno de los modelos más míticos de la marca alemana es el RUF CTR “YellowBird”, nombrado por la revista Road & Track como el coche más rápido del mundo en 1987.
Este modelo protagonizó en 1987 un vídeo que se ha convertido en leyenda del automovilismo. Stefan Roser, piloto probador de RUF en aquella época realizó una vuelta al viejo trazado de Nürburgring en unos increíbles 8 minutos y 5 segundos, un tiempo a la altura del BMW M3 E92 e incluso más rápido que el actual Porsche Cayman S. Sin embargo, lo más espectacular de la hazaña no es el tiempo, sino cómo se consiguió, ya que Roser no llevaba casco, ni guantes, ni tan siquiera un mono de carreras, todo ello entre el tráfico presente en Nürburgring Nordschleife, ya que la vuelta se realizó en un día de apertura al público.
Como podéis ver en el vídeo Stefan Roser hace gala de una habilidad impresionante, llevando el coche de lado en la mayoría de las curvas y subiéndose por todos los pianos. Especialmente espectacular es la segunda parte del trazado, donde podemos ver a Roser jugar con las transferencias de pesos en las numerosas curvas enlazadas que posee el trazado alemán.
El RUF CTR Yellow Bird se construyó sobre la base del Porsche 911 (930), tomando como base también su motor de 3.2 litros al que se le incorporaron dos turbos KKK y doble intercooler, elevando la potencia hasta los 476 CV y la cilindrada hasta los 3.4 litros, unas cifras espectaculares para la época.
El sistema de inyección y encendido también fue modificado, incorporando un sistema firmado por Bosch procedente del Porsche 962 que competía en Le Mans. Por otro lado el peso se redujo en 200 Kg con respecto al 930, sustituyendo paneles de la carrocería, puertas y capó por piezas de aluminio, dejando el peso en vacío en unos espectaculares 1150 Kg.
Respecto al resto de modificaciones, la más importante fue la caja de cambios con relaciones personalizables a petición del cliente, las llantas firmas por Speedline y unos impresionantes frenos Brembo de 330 mm. En cuanto a prestaciones, el RUF CTR “YellowBird” fue un avanzado a su época y sus prestaciones se asemejan mucho a las de deportivos actuales. Realizaba el 0-100 Km/h en 3,8 segundos y llegó a alcanzar 342 Km/h en pruebas en el circuito de Nardo.
Tan sólo se fabricaron 29 unidades con un precio de 220.000 dolares de la época. Actualmente sigue siendo un coche muy cotizado, siendo totalmente imposible hacerse con uno por menos de 200.000 euros.
Como siempre nos gustaría conocer vuestra opinión. ¿Qué os parece la vuelta de Stefan Roser a los mandos del CTR YellowBird? ¿Conocíais este modelo?