Las fuerzas y seguridad de Estado suelen siempre, escoger para su flota de vehículos, una marca que sea nacional o que, al menos, se hayan producido dentro de las fronteras del país. Con ello, el sentimiento de pertenencia aflora y, de paso, se consigue contribuir a la economía doméstica. En las últimas semanas, en cambio, nos despertamos con una noticia que saltó y revolucionó todo el escaparate mundial, el holding FCA (Fiat Chrysler Automobiles) iba a dejar de ser el proveedor de coches de policía en favor a Seat durante los próximos 3 años como mínimo.
Ahora, y tras el revuelo montado, sobre todo en la sociedad italiana, Seat ha querido ‘romper’ con las críticas y sacar pecho con una demostración de por qué el Seat León es un vehículo apto para la flota policial de Los Carabinieri y la Polizía di Stato, lo que en nuestro país equivaldría a la Guardia Civil y la Policía Nacional, respectivamente. Es importante recordar que las pruebas que se observan en el vídeo están grabadas en un circuito cerrado al público y con las máximas medidas de seguridad. Así que, coge palomitas que parecerá que estás viendo una acción digna de una película de acción.
Seat muestra por qué ha sido una buena idea, por parte del gobierno italiano, elegirles como proveedores de su flota de vehículos policiales
El vídeo, grabado como si se tratase de una reproducción realizada en los mismísimos Estudios de Cine de Hollywood, comienza haciendo énfasis con el propio nombre del cortometraje, bullerproof car, cuya traducción al castellano es ‘coche a prueba de balas’. Este título indica, ya de por sí, un nivel de seguridad muy alto para los funcionarios policiales en posibles situaciones de riesgo. De hecho, ni más ni menos que munición del calibre 22 es la que se utiliza en el rodaje, donde la diana se corresponde al parabrisas de una de las unidades. Tal es la dureza del cristal que las balas, cuya velocidad sobrepasa los 1.400 km/h, que no consigue perforarlo completamente, poniendo en riesgo la vida de los futuros ocupantes.
Además de esta parte del vehículo, Seat pone en práctica la seguridad de otros posibles puntos de riesgo, como las ventanillas laterales o las puertas. Para ello, se sigue utilizando munición y elementos que podrían ser lanzados durante una revuelta o manifestación. Por otro lado, en el recorrido de la reproducción también se puede observar, a grandes rasgos, cómo está equipado en su interior para ofrecer el mejor servicio a los cuerpos de seguridad.
Por último, se muestra de lo que es capaz en una persecución gracias a su motor de 150 CV de potencia para dar caza a todo aquel que huya en un coche tradicional. De esta forma, Seat quiere transmitir seguridad y confianza a dos colectivos. En primer lugar, a la sociedad italiana y, más concretamente, al grupo policial, ya que siempre han acostumbrado a disfrutar de coches puramente italianos, como los Fiat o los Alfa Romeo. El tiempo dirá si las cerca de 4.000 unidades de modelos Seat tienen el apoyo y la aceptación o, tras pasar los tres años de contrato, deciden volver a los tradicionales proveedores.