Ya habrás podido comprobar toda la información que hay acerca de los limpiaparabrisas de un coche. Son simples, sin tecnología que haya requerido una inversión millonaria para el fabricante y cuyo sonido a veces nos puede volver algo histéricos. Encontrada la solución a ese problema, un nuevo frente asoma por la mente y bastante serio además. ¿Cómo se apañan los motoristas cuando llueve fuertemente y les pilla la lluvia en la carretera?
A parte de tener siempre en mente evitar el caer en el temido aquaplaning, los motoristas deben centrarse en mantener una visibilidad que a veces se convierte en una tarea difícilmente posible. Ante esta situación, lo más recomendable es parar y esperar a que el temporal amaine pero, ¿qué ocurre si el lugar por el que se circula no es seguro para detenerse? Aquí es cuando entra en juego una innovación que podría evitar algunos accidentes.
Rainpal es una empresa que ha diseñado un pequeño sistema con el que pretende mejorar la visibilidad de este colectivo mediante el uso de un simple limpiaparabrisas. Sí, no tiene muchas más funciones. Eso sí, ¿qué características tiene y por cuánto podría conseguirse en el mercado?
Rainpal, el limpiaparabrisas que se acopla en la visera para aportarte mejor visibilidad en días de lluvia
Únicamente se necesitará colocar el mecanismo en el casco, el cual incluye un cepillo que barrerá todo el agua presente en la visera. Además, cuenta con un pequeño compartimento de agua con el objetivo de rociar un poco de líquido para poder limpiar el plástico transparente. La banda solo supone una reducción del campo de visión en tan solo 2 milímetros, algo inapreciable para que pueda ser la causa de un accidente.
El funcionamiento está asegurado para ser eficaz hasta una velocidad límite de 160 km/h, suficientes teniendo en cuenta la climatología adversa que habría en su hipotética utilización. Por otro lado, posee dos diferentes velocidades que le permiten evacuar una mayor o menor cantidad de agua, dependiendo de la tipología de la lluvia. Para accionar el mecanismo de barrido únicamente es necesario pulsar un botón situado en el mismo aparato o de forma inalámbrica a través de un mando que se acopla en el manillar.
La franja que recorre toda la visera tiene un puerto USB que se usa para cargar las pequeñas baterías que incorpora. De esta forma, tiene una autonomía de unos 90 minutos aunque para grandes distancias la compañía pone a disposición del cliente más juegos intercambiables. De la misma forma, es válido para su uso en cualquier casco integral por lo que la demanda podría subir en cuestión de unos meses.
Y por último, el precio. ¿Cuánto estarías dispuesto a pagar por este elemento de seguridad? Tal y como ya se expuso recientemente con la chaqueta que incorporaba un airbag, no es nada barato pero a fin de cuentas, podría evitarte tener un accidente. Unos 60 euros habrá que pagar por disponer de este elemento de protección, 13 euros más si quieres el pequeño mando para no tener que pulsar el botón de encendido desde el mismo aparato del casco.