Si esta mañana nos hacíamos eco de la noticia de que la NHTSA había bajado la puntuación en seguridad al híbrido más popular de Toyota, horas después nos llega otra gran noticia del fabricante japonés. Acaban de anunciar que han superado la barrera de los 6 millones de vehículos híbridos vendidos, desde que lanzaron el Prius en 1997.
Han sido necesarios 17 años para llegar a esta cifra, que cada año crece progresivamente. Estas ventas son acumulativas a nivel global, tanto de Lexus como Toyota, y alcanzan hasta el 31 de diciembre de 2013, con exactamente 6.072 unidades vendidas. Los cinco millones los alcanzaron solo hace 9 meses, así que en cuestión de pocos años conseguirán llegar por seguro a los 10 millones de híbridos circulando por todo el mundo.
Fue en agosto de 1997 cuando Toyota lanzó exclusivamente en japón el Coaster Hybrid EV, un autobús híbrido. Meses después, en diciembre, fue cuando llegó el Prius. Desde entonces las ventas y el catálogo disponible no han parado de crecer. En España no contamos con tantos modelos como en otros países como Estados Unidos o Japón. Los españoles solo tenemos acceso al Yaris Hybrid, al Auris Hybrid y el Prius.
Como decimos, cuentan con 24 modelos híbridos a la venta a lo largo de 80 países, y un híbrido enchufable. Pero esta expansión de los híbridos para las masas no tiene intención de parar. Esto es porque Toyota planea lanzar un total de 15 nuevos modelos híbridos, además de su llegada a nuevos países en los próximos dos años.
Haciendo números, estos 6 millones de híbridos vendidos desde 1997 han ayudado a reducir aproximadamente 41 millones de toneladas de CO2 emitidas a la atmósfera, que habrían sido emitidas por vehículos similares de gasolina. En cuanto al gasto de combustible, los híbridos de Toyota han permitido ahorrar casi 4000 millones de litros de gasolina, en comparación con los coches con motor de explosión.
El problema que plantean los híbridos es que son feos, y no resultan tan atractivos al público como deberían. Por eso esperamos que Toyota tome nota y la próxima generación del Prius, que saldrá el año que viene, sea mucho más agradable a la vista.
El problema no es que sean feos, si no que son muy caros con respecto a sus equivalentes en diesel,la diferencia de ahorro en combustible con respecto al diesel creo que no compensa y pierden capacidad de maletero.