El XL1 es una prueba de concepto donde Volkswagen nos mostró lo mejor que sabía hacer en cuanto a tecnología ecológica. Sin embargo, se han dado cuenta que no pueden llevar a producción un coche así, el cual tendría unas ventas marginales. Por eso este prototipo se usará como base para que otros modelos de la compañía se alimenten de su tecnología.
Y el Golf de nueva generación será el primero en tomar ventaja de estas mejoras. Habría que ir hasta 2019 para ver al nuevo Golf VIII, que tendrá emisiones por debajo de los 90 g/km. Seguramente esto lo encontremos en una variante híbrida del Golf, pues recordemos que en la generación actual tendemos disponible una variante eléctrica, que también está disponible en España.
Estas cifras nos hacen pensar en un Golf Bluemotion, que pasaría a ser un diesel híbrido, y que tendría importantes cambios en la aerodinámica, además de un peso realmente contenido, por debajo de los 1.100 kg —un peso similar al del Volkswagen up!—.
Esto será posible gracias a la plataforma MQB, sumada a un montón de innovaciones que irán centradas al mismo fin. Una dirección eléctrica por cable, motores más ligeros, turbocompresor eléctrico, etc. Son tecnologías que hoy solo podemos ver en modelos de alta gama, pero de aquí a cinco años serán estarán lo suficientemente rodadas para poder ser incluidas en un Golf.